Se asegura que más allá del resultado de las mesas de diálogo o negociación que establecerán los gobernadores de Jalisco y Guanajuato con los grupos, colectivos y organizaciones ciudadanas en torno a la presa El Zapotillo, el Gobierno Federal ya fijó su postura sobre el tema:

  1. La cortina de la presa será de 80 metros y no de 105.
  2. No se inundarán los poblados Temacapulín, Acacico y Palmarejo.
  3. Los gobiernos de Jalisco y Guanajuato tendrán que acordar, en función de lo anterior, cómo y de cuánto será el reparto del agua del río Verde que se almacene.

Fuentes cercanas a las negociaciones realizadas comentaron que los puntos anteriores le fueron notificados a los mandatarios Enrique Alfaro Ramírez y Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, por el propio presidente Andrés Manuel López Obrador durante el pasado encuentro que sostuvieron esta semana en Palacio Nacional.

Aseguraron que a partir de estas dos decisiones, cortina a 80 metros y la no inundación de los tres poblados, los gobernadores Alfaro Ramírez y Rodríguez Vallejo tendrían que ajustar sus negociaciones en torno al reparto del agua, amén de otros acuerdos o negociaciones a que lleguen con los pobladores y demás organizaciones ciudadanas que también se entrevistaron con el presidente López Obrador.

Cabe recordar que en julio pasado los gobernadores de Jalisco y Guanajuato firmaron un convenio para el reparto del agua del río Verde, pero sin tomar en cuenta a los opositores a la obra y esperando que con ello el gobierno federal reanudara los trabajos de construcción de la presa. Alfaro Ramírez declaró en su video que tras ese acuerdo con su homólogo guanajuatense, espara que el gobierno federal “cumpliera su palabra” e hiciera llegar los recursos económicos prometidos para esta obra.

En aquella ocasión, Alfaro dijo que con ese acuerdo, el tamaño de la cortina quedaba en manos de las autoridades federales, sin saber cuál era su postura definitiva al respecto.

Pero con su entrevista con el presidente López Obrador, las cosas cambiaron de posición y dieron la vuelta: el gobierno federal ya les habría dicho la altura de la cortina y su decisión de no inundar los poblados, para que a partir de ahí los gobernadores volvieran a conveniar.

Así, pues, será cosa de tiempo para confirmar lo anterior y saber a qué otros acuerdos se llega en las mesas de diálogo.