La mesa está puesta para que el domingo sean declarados nuevos dirigentes del PRI en Guadalajara, Pablo García Arias y Verónica Flores, como presidente y secretaria general, respectivamente, al ser la única fórmula que se registrará.
Ambas designación son una cortesía para la secretaria de Desarrollo Social, Claudia Delgadillo, y el actual dirigente del partido en la capital, Eduardo Almaguer, pues ya ni siquiera responden a un proyecto político en concreto, sino que es simplemente el reparto de cuotas.
Vamos, hasta el propio alcalde Jorge Aristóteles Sandoval tuvo que hacerse a un lado en la designación de ambos nuevos dirigentes, aunque por supuesto que dio su visto bueno para esta designación, amén de que con este tradicional “dedazo” se le cerró el paso a otros aspirantes que no están en la nómina municipal.
Para el domingo próximo está programado el registro de fórmulas aspirantes, pero qué cree: ¡que sólo habrá una! La de Pablo García y Verónica Flores, con lo que poco después de las 14:00 horas, cuando se cierra el plazo de registro, serán declarados como nuevos dirigentes del priismo tapatío.
Cabe señalar que no sólo en Guadalajara le hicieron honor a la tradicional forma priista de elegir a sus dirigentes, o séase por “dedazo”, sino que prácticamente eso fue en la mayoría de los municipios jaliscienses, aunque como en Tonalá, no sólo fue “dedazo” sino  hasta “nepotismo”, pues como secretaria general  del comité fue designada Lilí Mateos… ¡hija del alcalde Antonio Mateos!
¡No te acabes, PRI!