El gobernador Emilio González Márquez refiere su “sospechosismo” sobre las razones que mueven a las personas que recurren a los tribunales para frenar la construcción de la Villa Panamericana, en la zona de El Bajío, y poner así en riesgo la realización de los tan polémicos Juegos Panamericanos.
“Me llama la atención los objetivos que están buscando las personas que interponen estos procesos judiciales o sea quién gana y qué ganan cancelando los Juegos Panamericanos”, dijo en una entrevista realizada hoy por la mañana en Expo Guadalajara.
Pues sí, pueden abrirse todas las sospechas que se quiera, pero si un Tribunal da la razón a los quejosos no hay mas que de dos sopas: o a los inconformes les asiste la razón en base a las propias leyes o en este caso el Magistrado que detuvo la construcción de la Villa Panamericana actúa de manera irregular y fuera de la ley, lo que debería costarle un severo castigo o sanción por su actuar.
En ambos casos aun hay detalles por definir: Los quejosos recurrieron a los Tribunales confiados en que les asistía la razón, a sabiendas de que podrían rechazar su queja, y de que la construcción de la Villa era irregular. Preguntamos: ¿Las autoridades estaban seguras de que no había motivos de litigio con la construcción de esta infraestructura en dicha zona? ¿O creyeron que nadie alzaría la voz para quejarse?
¿Se puede hablar de boicot de los Juegos Panamericanos por parte de ciudadanos preocupados por su entorno y que recurren a las instancias legales a que tienen derecho? Absurdo pensar que así sea. ¿Entonces es el Tribunal Administrativo el interesado en boicotear esta justa deportiva? Mmmm, la verdad que lo dudamos.
¿El boicoteador, entonces, es solamente el magistrado que emitió la resolución a favor de los quejosos? ¡Increíble que así fuera, pues no sabemos sus razones! Pero, ¿acaso emitió la resolución a su mero capricho sin que la ley lo respaldara? ¿Acaso se arriesga, sin importarle nada, a una severa sanción que pudiera acarrearle ese capricho?
La verdad que dudamos todo lo anterior, y la sospecha se abre en el sentido de que más bien las autoridades no cuidaron todos los detalles al definir que la Villa Panamericana se levantara en esa zona de El Bajío.
Ya veremos qué sucede más adelante.