Efímero ex colaborador del entonces candidato presidencial panista Felipe Calderón Hinojosa en su equipo de campaña -fue relevado por Abraham González Uyeda-, Alonso Ulloa Vélez, ex varias veces diputado y ex secretario de Promoción Económica en el sexenio de Emilio González Márquez, presentó ayer su renuncia como militante del Partido Acción Nacional.
En una carta dirigida a Gustavo Madero Muñoz y Gustavo Macías Zambrano, presidentes nacional y estatal del PAN, y luego de hacer un recuento de los grandes momentos que vivió en el PAN desde que a los 19 años fue su representante en casilla y voto a su favor, Ulloa Vélez revela sus razones de esa renuncia:
“Mis convicciones siguen estando en los documentos básicos del PAN, pero la organización actual, particularmente su dirigencia a nivel local y nacional no tienen nada que ver con ellos. Las motivaciones y actuar de los actuales dirigentes no tienen nada que ver con aquellas que postulaba el PAN, ni con las mías. Por eso creo que es momento de irme, y el día de hoy presento a Ustedes mi renuncia al PAN. A ese PAN de hoy que no es ya al que me afilié y en el que creí…”.
La renuncia de Alonso Ulloa al PAN se registró apenas horas después de que se difundieran las declaraciones del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, en el periódico Excelsior, en el sentido de que su ex jefe González Márquez le había pedido recibir y platicar con el entonces aspirante a la gubernatura por el Partido Movimiento Ciudadano -que en su momento apoyó a Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial en contra del propio Calderón-, Enrique Alfaro Ramírez, y a quien quería le sucediera en la gubernatura.
Desde que salió del gabinete de González Márquez para ir en busca de la candidatura al gobierno del Estado y posteriormente declinar a favor del entonces precandidato Alfonso Petersen Farah -quien perdió frente a Fernando Guzmán Peláez-, Alonso Ulloa había guardado “sepulcral” silencio sobre lo que sucedía al interior de su partido.
De hecho, desapareció de la escena pública y se dedicó a su negocio de consultoría.
Ulloa Vélez nada declaró públicamente sobre la llegada de Miguel Ángel Monraz a la dirigencia en sustitución de Hernán Cortés. Tampoco dijo nada cuando Monraz solicitó licencia y fue relevado por el actual dirigente Macías Zambrano. Mucho menos hizo comentario alguno cuando Gustavo Madero le ganó la dirigencia nacional al presidente Calderón, ni cuando fue relevado interinamente por Ricardo Anaya ni posteriormente cuando retomó la dirigencia.
Fue ahora, 48 horas después del anuncio de que Emilio González había sido expulsado del PAN y pocas horas después de la revelación de Calderón sobre la relación González Márquez-Alfaro Ramírez, cuando llegó a la conclusión de que las dirigencias de Macías Zambrano y Madero Muñoz “no tienen nada que ver…” con las convicciones (que) siguen estando en los documentos básicos del PAN…”.
Antes, Alonso Ulloa no tuvo razones para dar el paso que dio de renunciar a su militancia panista. Y sí las tuvo no las hizo públicas y mucho menos se atrevió a dejar de ser panista sino hasta ahora, cuando el mundo se le vino encima a su ex jefe González Márquez…
Vamos, ni siquiera encontró motivos para renunciar al partido durante estas semanas de campaña de Guillermo Martínez Mora -a quien relevó en la SEPROE-, de quien fungía como asesor, al igual que el ex secretario de Educación y ex dirigente estatal del PAN, Antonio Gloria Morales, de quien también se difundió la versión de que hoy viernes seguiría los pasos de Alonso y dejaría al blanquiazul.
Pero eso no sucederá… por ahora, según confesó ayer a quien esto escribe.
Así, pues, Alonso Ulloa decidió no luchar como militante y desde el interior para reformar a su ahora ex partido. Simplemente renunció cuando vio que su ex jefe y amigo era “sacrificado” en medio de una lucha electoral en la que, dicen, el ex Mandatario decidió participar “tras bambalinas”.
La pregunta que queda ante su renuncia es: ¿Continuará asesorando a Martínez Mora o lo dejará “al garete”?