De los diversos discursos que en estos cuatro meses ha pronunciado el gobernador Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, subrayo, registro y archivo -para recordarlo en el transcurso y al final de su sexenio- dos y medio párrafos del que pronunció ayer en el marco de la inauguración del I Foro Regional “Planeación y Rendición de Cuentas en Materia Metropolitana”.
Los dos y medio párrafos que estaré recordando cuando sea necesario son los siguientes:
“Ha llegado el momento de unir esfuerzos y dejar a un lado la ‘vetocracia’. No es posible que los grandes proyectos de ciudad no se hayan concretado por los grupos de presión, no se hayan concretado por la debilidad y la falta de firmeza de un estado rector que incluye a todos, define el proyecto y lo lleve a la realidad, para que pronto esto se pueda reflejar en mejor beneficio para nuestros hijos y para las futuras generaciones. Hoy, cualquier medio de presión, cualquier grupo, puede llegar a dinamitar los proyectos de agenda del estado donde se pusieron de acuerdo en el Congreso, en el Ejecutivo, asociaciones civiles, universidades.
“Llegó la hora de implementar con una firme rectoría la aplicación del estado de derecho en materia de planeación y consolidar los proyectos que se han venido postergando por cada trienio o sexenio, como es el abasto de agua, como es el transporte y la movilidad, como es la integración y la planeación de la gestión del territorio, para que unidos podamos tener un desarrollo, un crecimiento de vivienda ordenado, pero sobre todo, con una nueva convivencia, con una nueva relación con la naturaleza.
“No podemos seguir pensando que el desarrollo de una ciudad va siempre en contra del mantenimiento de nuestras áreas naturales o nuestras áreas verdes…”.
Hasta aquí los dos y medio párrafos redactados casi al final de su discurso del día de ayer.
Es sabido que para resolver un problema primero hay que admitir que existe. Y aplaudo que Aristóteles Sandoval, el gobernador del Estado, reconozca que lo que denominó “vetocracia” es uno de los principales problemas a los que desde hace años se han enfrentado los gobiernos estatal y municipales; “vetocracia” aceptada, y en no pocas veces alentada, por los pasados gobiernos panistas -o grupos empresariales- que se “apanicaron” ante el grito de unos cuantos apostados en la plaza pública, los menos, y refugiados, los más, en varios medios de comunicación que se prestaron -y algunos se prestan aun- al engaño de estos grupos que dicen ser -se autonombran y se autodesignan- la “voz del ciudadano”.
En el colmo de los casos, algunos de ellos se autodefinen como “representantes” de “los ciudadanos”, dando por hecho que lo son de todos o de la mayoría.
Pero la realidad es que varios de estos organismos “ciudadanos” no pasan de estar integrados por no más de una veintena de personas cuya habilidad para el discurso y “enganchar” a los medios de comunicación a través de los cuales difundir sus posturas, es innegable. Hay casos patéticos en donde no son más de cuatro, y en casos extremos, hasta uno solo, quienes a través del hábil manejo de los medios de comunicación y de las redes sociales colocan contra la pared a gobiernos completos.
Curiosamente -¿lo habían notado?- no pocas de esas voces “ciudadanas”, a la llegada del gobierno estatal priista, se han silenciado, prácticamente han desaparecido de los medios de comunicación y de las redes sociales.
No obstante, reitero, vale estar al pendiente para confirmar que el gobierno de Aristóteles Sandoval -espero que los gobiernos municipales lo emulen-  implemente “con una firme rectoría la aplicación del estado de derecho” para evitar que “los grandes proyectos de ciudad no se concreten por los grupos de presión” y “por la debilidad y la falta de firmeza de un estado rector…”.
Que conste, son las palabras textuales del propio Gobernador del Estado…