Nueve días han transcurrido apenas del inicio del gobierno de Jorge Aristóteles Sandoval Díaz y ya es noticia mundial al ser asesinado a las 15:15 horas de hoy sábado 9 el recién designado como secretario de Turismo. J. Jesús Gallegos Álvarez, horas después de haber sostenido una reunión de trabajo de gabinete en Casa Jalisco.
“El posible móvil de lo sucedido obedecería a actividades económicas y empresariales anteriores al cargo para el que fue designado el pasado 28 de febrero…”, expresó el secretario general de Gobierno, Arturo Zamora Jiménez, con lo que deslindó al gobierno estatal y a su cargo como funcionario de ser motivo del crimen en contra del empresario inmobiliario.
Si bien es cierto que esta línea de investigación pudiera ser la más viable, queda la duda si los colaboradores del Gobernador no fueron sometidos a una investigación personal exhaustiva para evitar cualquier sorpresa o si por ser el responsable de una cartera noble como es la de Turismo, se consideró innecesario hacerlo con quien fue desigando su titular.
Valga decir que de entre los designados integrantes del gabinete de Sandoval Díaz, Gallegos Álvarez llamó la atención porque no era el suyo uno de los nombres que se presumían formarían parte del gabinete, porque los propios empresarios locales dijeron desconocer quién era, porque no tenía antecedentes dentro del sector turístico y, además, con él se rompía una tradición de décadas de entregarle esta cartera a la Cámara de Comercio de Guadalajara.
El crimen de J. Jesús Gallegos Álvarez no sólo fue noticia en Jalisco y el país, sino que en su página de internet el diario español El País la destacó como la segunda nota más importante a nivel internacional, sólo después del tema Chávez-Venezuela: “Asesinado el secretario de Turismo del Estado mexicano de Jalisco“, tituló.
En Italia, el diario La República tituló así su nota:  “Messico: attentato nel Jalisco. Ucciso il locale ministro del Turismo: José de Jesús Gallegos”
La verdad que resulta muy atrevido considerar este crimen como una amenaza para el gabinete de Aristóteles Sandoval y para el gobernador mismo, pues con la información que hasta el momento se conoce, los pocos días que el funcionario tenía en el cargo y toda vez que no había tomado decisión alguna de trascendencia como Secretario de Turismo, todo indica que este asesinato quedaría en el plano personal.
Sin embargo, lo que quizás este asesinato obligue es a que los funcionarios de primer nivel del Gobierno del Estado se vean obligados a tener seguridad personal, y a reforzar la que ya tiene el propio Mandatario y los responsables del área de seguridad pública.