El próximo miércoles 13 de diciembre ya sabremos quién será el candidato por parte del partido Revolucionario Institucional a gobernador para el estado de Jalisco. Esto será importante pues el designado irá como número dos en la contienda, esa posición le pone en la posibilidad de lograr por medio de mucho trabajo y esfuerzo una victoria o, terminar incluso en tercer sitio de las preferencias.

Para entender el por qué un candidato del partido en el poder inicia segundo en la competencia, y lo mucho que ha cambiado la política pero no los partidos, quiero situar de una forma concisa tres realidades que juegan a favor o en contra del futuro candidato priista a la gobernatura del estado de Jalisco.

EL GOBIERNO.

Para el candidato priista estatal los escándalos heredados del gobierno federal de corrupción y enriquecimiento ilícito juegan en contra. Los malos resultados en microeconomía después de las reformas estructurales también.

En lo estatal el gobierno de Jorge Aristóteles Sandoval ha sido de buenos resultados en el campo, que se refleja en el incremento de exportaciones. Cumplidor en educación y programas sociales.

La generación de empleos es tal vez el logro más destacado y reconocido a nivel federal de este gobierno.

Pero el gobernador Aristóteles Sandoval ha tenido muchos problemas en el área de seguridad, al grado incluso de marcar su administración desde los primeros días. Usted no encontrará resultados destacados en seguridad pero si muchas referencias a errores y crímenes destacados en esta administración.

Antes de las elecciones de 2015 el gobernador mantuvo control de su partido, y mostraba un equipo sólido con sus secretarios, al grado de lograr que Arturo Zamora renunciara a ser Secretario General. Pero, la derrota anunciada que se convirtió en realidad por haber escogido un mal candidato a presidente municipal de Guadalajara, le afectó, y pareció dejar a la deriva al PRI estatal y el grupo compacto de Secretarios no lo parecen más.

Sin embargo desde diciembre de 2016 el gobernador ha estado realizando acciones que le trajeron buenos comentarios, posicionándolo a nivel nacional como uno de los mejores gobernantes. Muestra de ello es la última medición del periódico MURAL donde los jaliscienses le dan una buena calificación a su gestión, excepto… En seguridad.

EL PARTIDO

El próximo candidato priista a la gobernatura de Jalisco encontrará un partido listo para seguir trabajando o un partido para tratar de organizar según sea el caso del elegido.

Lo que con la victoria de Jorge Aristóteles Sandoval Díaz como gobernador de Jalisco parecía ser el regreso contundente del Partido Revolucionario Institucional al dominio del escenario político, se complicó con la desastrosa dirigencia de Hugo Contreras Zepeda, quien debió salir anticipadamente de la dirigencia estatal después de la derrota sufrida en 2015 a manos de Enrique Alfaro y su partido político Movimiento Ciudadano.

En 2015 antes de elecciones Hugo Contreras Zepeda dirigía un PRI que gobernaba 87 municipios. Después de las elecciones donde impuso candidatos, incluido su cuñado Roberto Mendoza Cárdenas para presidente de Zapotlanejo, quien por supuesto perdió, el PRI se quedó solamente con 62 municipios.

De los 62 municipios ganados, 17 los lograron gracias a la alianza con el partido Verde Ecologista. De los 87 municipios que tenía el PRI al inicio de la dirigencia de Hugo Contreras perdió 43, entre ellos: Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque, Zapotlanejo.

En el congreso local el PRI tenía 17 diputados antes de la dirigencia de Hugo Contreras, después de 2015 solo 13 diputados.

La salida de Hugo Contreras Zepeda trajo a José Socorro Velázquez, quien con su estilo pasivo trató de mantener la unidad en el partido, pero quien no pudo motivar a los priistas para ser oposición y se convirtieron en comparsa de los gobiernos del partido Movimiento Ciudadano, mientras lamían las heridas provocadas por la derrota.

Desde el 30 de marzo de 2017, Héctor Pizano Ramos es presidente estatal del PRI, su trabajo ha sido notorio sobre todo en su interés por reactivar el priismo en los 125 municipios de Jalisco.

Mención aparte merece su idea de ser una verdadera oposición en los municipios que no gobierna, lo cual le ha valido volver a posicionar al PRI en el estado.

Algo que en las siguientes elecciones extrañara el PRI, es su alianza con el Partido Verde Ecologista, pues hasta hoy no han podido sanar esa relación que Hugo Contreras dejó en muy mala situación.

Dos corrientes priistas de contrastes: Mientras Rubén Vázquez se ha mantenido trabajando en los municipios con su Movimiento Territorial; Leobardo Alcalá y su MONTU no pasa de amagar sin aportar.

EL ADVERSARIO.

La capacidad de organización de Enrique Alfaro como adversario ha cambiado desde la última elección estatal que jugó.

Su principal ventaja es ser dueño de su partido político Movimiento Ciudadano, lo que le ha permitido acomodar todo a su favor en la estructura estatal y lograr que todos sus presidentes municipales, diputados y regidores jueguen a su favor.

Ahora el partido Movimiento Ciudadano tiene casas de enlace en casi todos los municipios de Jalisco, y Enrique Alfaro ha hecho visitas los fines de semana a los municipios desde hace meses.

Mucho le ha ayudado a Enrique Alfaro el no haber tenido oposición durante más de un año de gestión, pues no existieron voces de peso que cuestionaran su gobierno. Cuando empiezan a aparecer cuestionamientos a su forma de gobernar Alfaro pierde la cabeza.

El desgaste de gobernar ya le pega a Enrique Alfaro, pero tiene aún una sólida estructura de comunicación en redes sociales que le permitirá golpear en el proceso electoral, y recordemos que la gente de Emilio González está jugando del lado de Alfaro, la guerra sucia será total.

Así pues las cosas no serán fáciles para ninguno de los aspirantes a candidato estatal para gobernador por el PRI: Arturo Zamora, Héctor Pizano y Eduardo Almaguer.

¿Será capaz el PRI Jalisco de escoger el perfil adecuado para el 2018?