La semana pasada el senador Jesús Casillas Romero fue designado delegado en funciones de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP)…
Sí, leyó bien: delegado de la CNOP, el sector popular del PRI que todo mundo sabe que está “muerto” excepto los priistas.
Casillas Romero fue ungido delegado por su jefe de bancada, Emilio Gamboa Patrón, a la sazón secretario generan a nivel nacional del sector popular priista. Y lo designó para que vaya preparando -casi al cuarto para las 12- la elección de delegados que habrán de participar en la asamblea nacional donde será relevado de la dirigencia Gamboa Patrón.
Durante cinco años la regidora Elisa Ayón se encargó de cuidar las siglas de este sector popular, pero nada más. Inclusive, creo que sólo ella sabía que de la existencia de la CNOP, como quizás ahora lo sepa también Jesús Casillas.
Pero, bueno, con el PRI en la presidencia de la República y al frente del gobierno de Jalisco, el PRI parece estar dispuesto a “revivir” a sus otrora poderosos sectores y que hoy o están muertos o moribundos. ¿O alguien sabe dónde está aquel poderoso sector obrero? ¿O el inagotable sector campesino que  aportaba los votos necesarios “verdes” suficientes para que el tricolor ganara las elecciones, aun de “última hora?
La verdad es que este encargo de Gamboa para Casillas parece ser simplemente un escaparate para que el senador jalisciense se mantenga vigente en su aspiración por ser candidato a la presidencia municipal de Zapopan y mantenerse como eterno aspirante a dicho cargo.
Porque la tarea de Jesús Casillas no es trabajar para que el sector popular en Jalisco vuelva por sus viejos fueros. Y es que quizás no haya ni con quién completar el quórum necesario. Inclusive, quizás ya ni se acuerden quiénes integraban dicho sector.
No, Casillas Romero tiene como encomienda preparar todo el rito aquel de “elegir” delegados que vayan y levanten la mano para elegir al próximo dirigente nacional, a fin de darle legitimidad, pero nada más.
Esperemos qué tanto “jugo” le saca Jesús Casillas a su nueva encomienta con miras al 2015, porque por otro lado otro aspirante anda de delegado nada menos que en Baja California, donde habrá de elegirse gobernador. Y nos referimos al diputado Abel Salgado.