Enmedio de la euforia generada por las acciones y decisiones tomadas y llevadas a cabo tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, en lo que respecta a los inmigrantes jaliscienses en los Estados Unidos, y el “gasolinazo” en lo que toca a quienes viven en la entidad, y que colocó la imagen del gobernador Jorge Aristóteles Sandoval Díaz en un nivel de aceptación y reconocimiento como quizás no se había registrado en lo que va de su administración, un conflicto en materia de salud empaña este jolgorio: la licitación para la adquisición de medicamentos para el Seguro Popular.
El magistrado Alberto Barba otorgó a la empresa Dimesa, S.A. de C.V. la suspensión provisional para que quede sin efecto, por el momento, la licitación pública nacional para la adquisición de medicamentos, mezclas y otros insumos al Seguro Popular, debido a diversas irregularidades en las bases de esta licitación.
Las palabras expresadas por el titular de la Secretaría de Salud, Antonio Cruces Mada, son más que elocuentes del serio problema que enfrenta el sector salud de Jalisco en este rubro:
“Hoy día estamos metidos en un bache, por decirlo de esa manera, porque la empresa Dimesa metió un recursos de suspensión del proceso de licitación, tal cual, ustedes recuerdan, metió en su momento la empresa Lo Medic…”.
Pero este problema ya tuvo interés nacional a través de los espacios periodísticos de dos destacados analistas económicos. Uno de ellos, David Páramo, en su columna “No tires tu dinero”, en el periódico Excelsior, escribió anteayer, bajo el título “Corrupción tapatía”, lo siguiente:
“Hace algunos días le informé en esta columna sobre los problemas de desabasto que presenta el sector salud de Jalisco, en buena medida porque se realizaron licitaciones a modo, en las cuales el ganador no sólo no tenía la infraestructura, sino tampoco la capacidad de atender a lo que se comprometió.
“Ahora surge un nuevo problema. Resulta que hasta el Seguro Popular está teniendo problemas de desabasto, en buena medida porque la Secretaría de Salud de Jalisco, en encabeza Antonio Cruces Mada, ha incumplido con el pago de más de 900 millones de pesos con las empresas que dispersan los insumos necesarios para este seguro.
“Cruces convocó a un concurso para renovar el contrato de distribución, el viernes se entregaron las propuestas técnicas, por 700 millones de pesos. Lo que debe preocupar, además del retraso de pago a los actuales encargados de dar servicio integral, es quiénes están atrás de estos contratos. Entre ellos, debe contar a Abisalud, de José Hiram Torres Salcedo -actual regidor en Zapopan que gobierna el alfarista Jesús Pablo Lemus Navarro, expresidente de la Coparmex-, que fue sancionada con un millón de pesos por no cumplir un contrato de 501 millones de pesos para distribuir medicamentos del Ipejal. Quienes buscan explicaciones sobre esta presencia apuntan hacia los de Movimiento Ciudadano, Ismael del Toro y Carlos Lomelí.
“De acuerdo con diversas fuentes, el desabasto en la Secretaría de Salud, Ipejal y Seguro Popular alcanza niveles del 80% en algunos hospitales y centros de salud (…). El gobernador de esta entidad, Aristóteles Sandoval Díaz, ha prometido en forma reiterada que resolverá el problema, sin embargo, no se ha pasado de este nivel…”.
La columnista del Grupo Reforma, Lourdes Mendoza, en su columna “Con estilo”, escribió ayer lo siguiente:
“Siguiendo con escándalos, ya le había comentado sobre todas las irregularidades en la adjudicación de la licitación de medicamentos del Instituto de Pensiones de Jalisco a Abisalud, lo cual ha llevado a un desabasto de fármacos que está afectando a miles de jaliscienses. Así como que los ‘visionarios emprendedores’ y fundadores de esta compañía Christian Domínguez González y José Hiram Torres Salcido sólo tenían 24 años cuando la crearon. Lo que no sabíamos era que Hiram, en esos entonces, 2009, ¡era secretario particular del ex senador y diputado federal de Movimiento Ciudadano, Carlos Lomelí Bolaños!…
“El gobernador Aristóteles Sandoval debe actuar y exigirle a Antonio Cruces Mada, secretario de Salud del Estado, que revoque los beneficios a estas compañías. Y Enrique Alfaro, por aquello de las elecciones y posibles malos pensamientos, desmarcarse y pedir el máximo rigor de la ley ante estos abusos que afectan las finanzas públicas y la salud de miles de ciudadanos…”.
Así, pues, como no han pasado desapercibidas para los medios de comunicación de circulación nacional las decisiones y acciones emprendidas por Aristóteles Sandoval ante el “gasolinazo” y las acciones de Trump, tampoco han ignorado estas irregularidades en las que involucran también a funcionarios de elección popular del partido alfarista Movimiento Ciudadano.
La atención está puesta en qué hará el gobierno aristotelista ante esta caso que amenaza con crecer como “bola de nieve” y llevarse a más de uno “entre las patas”, como dicen popularmente. Al tiempo.