Ayer el Comité Directivo Estatal del PAN, en su sesión ordinaria, decidió enviar a la Comisión de Procesos Internos para su análisis y veredicto la situación que guarda la conducta de cuatro de sus diputados locales, que decidieron “romper” con su fracción parlamentaria y trabajar en los asuntos legislativos -eso dicen ellos- con los cinco legisladores que conforman la bancada del Partido Movimiento Ciudadano.
El futuro de Guillermo Martínez Mora -que parece ser el líder del grupo-, Víctor Manuel Sánchez, el segundo en tener la “voz cantante” en el grupo; Juan José Cuevas, el más silente del grupo; y Alberto Esquer, quien de pronto dejó de hablar como lo hacía antes, dentro de las filas del Partido Acción Nacional está ahora en manos de dicha Comisión, si antes ellos no “rompen” con el Bloque Opositor del que forman parte.
Y todo parece indicar que el Comité Estatal panista tiene urgencia por definir la situación de este cuarteto de legisladores, pues prácticamente le dieron una semana hábil a la Comisión de Asuntos Internos para emitir una resolución, al convocar a sesión el próximo lunes 10 de febrero para recibir el veredicto y considerar cuál es el siguiente paso, si antes los diputados no abandonaron el autodenominado Bloque Opositor.
Pareciera ingenuo creer que la fecha elegida por los cuatro panistas para revelar la integración del Bloque Opositor -o sea su alianza con los diputados alfaristas- fue al azar, pues sucedió nada menos que cuando su dirigente nacional, Gustavo Madero Muñoz -jueves 23 de enero- se encontraba ya en Puerto Vallarta para encabezar, al día siguiente, la Plenaria de los diputados federales de Acción Nacional.
Vamos, eligieron el día en que sabían que los “ojos” panistas del país estaban posados en Jalisco.
Y sobre decir que Gustavo Madero y Miguel Ángel Monraz, dirigente estatal, abordaron este tema en privado, amén de que el dirigente nacional tuvo ante su vista lo publicado en todos los medios locales durante estos días sobre la interpretación que se le dió a dicho Bloque: que los panistas se “desmarcaban” de su fracción y se aliaban a la del adversario político.
Entendemos, pues, que Guillermo, Juan José, Víctor y Alberto sabían que la noticia de su alianza con los diputados alfaristas le llegaría “fresquecita” y de “primera mano” a su dirigente nacional, ya sea porque confiaban -como confían- que no violaban estatuto alguno o simplemente porque decidieron darle de esta manera la “bienvenida” a Madero para hacerle saber que a ellos nadie los controla.
El “no existen medios panistas, somos o no somos”, que les envió al día siguiente desde Puerto Vallarta su dirigente estatal, Miguel Ángel Monraz, y el “los conmino a que se deslinden públicamente del G-10 a la brevedad posible” de su coordinador Gildardo Guerrero, son mensajes que sin duda  tuvieron el visto bueno de la dirigencia nacional como los primeros pasos para hacer “entrar en razón” a los panistas opositores.
Pero al parecer ambos llamados les hicieron lo que “el viento a Juárez”, pues hoy sin rubor alguno se “presentaron en sociedad” con sus aliados del Partido Movimiento Ciudadano, encabezados por su líder “moral, Enrique Alfaro Ramírez, en la presentación de la “Ley Antiderroches”, celebrada en el Club de Industriales.
Así, pues, no dudamos que si antes del  lunes 10 de febrero no se “deslindan” del Bloque Opositor, el futuro que les espera podría ser el que les digan… ¡”A volar gaviotas…!”