Mientras reaparece César Madrigal Díaz como aspirante a la presidencia del comité estatal del PAN y se perfila para buscar la reeleción el actual dirigente, Miguel Ángel Martínez Espinoza, con el apoyo de algunas corrientes que lo impulsaron la primera vez, del otro lado se conformó una mesa de diversos grupos panistas desde la que se busca postular a un candidato con posibilidades de imponerse en la contienda.
Desde semanas atrás han sostenido encuentros diferentes liderazgos -o sus representantes- de la zona metropolitana y de diversas regiones del estado, que buscan disputarle al grupo denominado “Comité Estatal” la dirigencia estatal que deberá de renovarse antes de que concluya el año, al igual que deberán hacerlo, y ya comenzaron el proceso para ello, por la presidencia nacional.
En esta mesa se encuentran el ex presidente municipal de Guadalajara, Fernando Garza Martínez; el ex procurador del Estado, Tomás Coronado Olmos; el ex diputado federal Elías Íñiguez; los ex presidentes municipales de Unión de Tula y de Cocula, Jaime Díaz Brambila y Félix Ibarra, respectivamente; el ex dirigente del PAN en Guadalajara, Rodolfo Ocampo Velázquez; el ex diputado Joel Arellano; Rubén Isaac López González, ex director de Capacitación, por parte de los panistas que impulsaron la precandidatura presidencial de Juan Carlos Romero Hicks; Antonio Gloria Morales, por parte del grupo del ex gobernador Emilio González Márquez; y Fabiola Martínez y Carlos Arias Madrid, por parte de la corriente del ex senador hoy morenista José María Martínez Martínez, entre otros.
Los integrantes de esta mesa han comenzado las negociaciones y acuerdos para postular a su candidato que, en principio saldría de entre el ex diputado federal y local Joel Arellano -ex responsable de las finanzas en las campañas presidenciales de Josefina Vázquez Mota, primero, y de Ricardo Anaya Cortés, después, y uno de los jaliscienses más cercanos al ex secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda- y del ex regidor Carlos Arias Madrid, ex aspirante a la dirigencia del PAN en Guadalajara e integrante del grupo “chemista”.
Aunque aún no se cierran los acuerdos ni hay una decisión tomada, hasta el momento quien ha sumado el mayor número de simpatías y apoyos es el ex diputado Arellano Arellano, pero nada está todavía escrito, pues aún faltan detalles por concretar.
Se asegura que la decisión de crear este bloque panista en la disputa por la dirigencia estatal es que la dispersión de fuerzas internas es lo que le ha permitido al grupo del “Comité Estatal” imponerse en los pasados procesos y seguir avanzando aún y cuando ello signifique administrar una derrota que, dicen, no puede ser eterna; y es por eso que hoy han decidido sentarse a dialogar y negociar, sumando voluntades y dejando a un lado los egos que generalmente dan al traste con cualquier acuerdo, con el fin de terminar con la era del “Comité Estatal” al frente del PAN.
El tiempo corre, y si en realidad estos grupos diversos asumen una actitud de humildad y cede cada uno en sus pretensiones por querer quedarse con todo el “pastel”, entonces se convertirán en un adversario fuerte para quienes hoy mantienen el control del partido y que seguramente no se quedarán con los brazos cruzados.
Esperemos, pues, los pasos que darán ambos grupos contendientes y la postura que asumirá el panismo del “centro” ante lo que sucederá en Jalisco, una de las entidades donde Acción Nacional puede renacer de entre sus cenizas.
