El paso del huracán Jova por tierras jaliscienses, dejando una estela de destrucción y desolación entre los habitantes de 13 municipios de la Costa Sur, representaba quizás la mejor oportunidad para el secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez, de tener una actuación impecable de preocupación y atención para los cientos de familias damnificadas, que de alguna manera le diera puntos a favor en su aspiración a ser candidato del PAN a la gubernatura.
Y máxime que el gobernador Emilio González Márquez le ha dejado toda la cancha pública para su lucimiento.
Sin embargo, Guzmán Pérez Peláez, como segundo de abordo en el Ejecutivo y responsable de la política interna en la entidad, ha dejado perder esa oportunidad e incurrido en lo primero que debió de evitar: partidizar la tragedia de la Costa Sur.
Quizás en Casa Jalisco y en Palacio de Gobierno se tenga otra óptica de lo que ha sido la actuación de nuestras autoridades en este caso, pero el simple hecho de haber reaccionado tardíamente y actuado con tanta lentitud ante el desastre que dejó Jova, ya las coloca en una posición negativa.
Hoy es unánime la crítica a la actuación del Ejecutivo ante el fenómeno natural que azotó las costas jaliscienses la madrugada del martes 12.
Pero la actuación de Fernando Guzmán ha dejado mucho que desear, reitero, como segundo en la estructura de gobierno, porque no ha sido mejor la actuación de otros funcionarios como Alfonso Petersen, Martín Hernández y Alvaro García, por referirnos a los titulares de áreas que también tienen que ver en la atención a los damnificados.
Pero, cuáles han sido los “pecados” de Fernando Guzmán:

  • Visitó sólo una zona del municipio de Cihuatlán por espacio de pocas horas, ante el compromiso de comer aquí en Guadalajara con sus compañeros de gabinete que le manifestarían su apoyo para ser candidato a Gobernador.
  • No ha regresado a visitar la zona devastada, salvo cuando acompañó al gobernador Emilio González en Melaque y La Huerta, sin recorrido de por medio, a reunirse con los alcaldes de aquellos municipios.
  • No se han realizado reuniones de análisis, evaluación y toma de decisiones con las dependencias estatales y federales involucradas, para atender a los damnificados y reconstruir la zona dañada.
  • Ayer se reunió únicamente con los alcaldes de extracción panista de los municipios afectados en la Costa Sur.
  • Sin cubrir las formas de su propia investidura y la de los diputados, acudió al Congreso del Estado, junto con los alcaldes, para entrevistarse con los diputados y abordar el tema de los recursos económicos necesarios para la reconstrucción y apoyo a damnificados.
  • Dejando a un lado la postura institucional que el caso ameritaba, ignoró al presidente del Congreso, Salvador Barajas, de extracción priista, y prefirió dirigirse con el coordinador de la bancada panista, Gustavo Macías.
  • También despreció, pese a que su compañero diputado Abraham González tramitó el encuentro, entrevistarse con la presidenta de la Comisión de Hacienda, diputada Patricia Retamoza, de extracción priista, a quien le mandó decir que la atendía en las escaleras del Palacio Legislativo.
  • Se molestó ante los reporteros porque osaron preguntarle sobre la transparencia ausente de los recursos obtenidos por otros créditos.

Sin duda, pues, que la partidización -que no politización, entiendan quienes así lo dicen- de la tragedia que azota a la Costa Sur de Jalisco representa para el aspirante a la candidatura del PAN a la gubernatura, Fernando Guzmán Pérez Peláez, un alto costo en su camino por ese logro.
Peor error será minimizar o despreciar la crítica y mantener esa postura.