Con “bombo y platillo” y convocando a los medios de comunicación que acudieron para dar cuenta de un “trascendente” hecho, el diputado independiente Pedro Kumamoto Aguilar dio a conocer que del 70% de su sueldo que cobra pero no gasta en necesidades personales, logró recaudar 551 mil pesos que se destinarán a proyectos a realizar por parte de asociaciones civiles.
Curiosa, extraña y sospechosamente, contrario a la información anterior, el joven diputado nada dijo del incremento de sueldo que aprobó y recibió hace cuatro quincenas. Guardó silencio. Él, al igual que sus 38 compañeros, se aprobaron un incremento salarial “por debajo de la mesa”, en lo oscurito.
Ni durante ni después de la rueda de prensa, el joven Kumamoto dijo algo respecto a que a diez meses de haber asumido el cargo, ya goza de un incremento salarial que él y sus compañeros se aprobaron a escondidas.
Tampoco nada dijeron los 15 diputados del partido cuyo líder moral dice que no son igual que los demás. Me refiero, por supuesto, a los legisladores del Partido Movimiento Ciudadano que comanda Ismael del Toro y del que también forma parte el diputado Augusto Valencia que se ha convertido en un experto no sólo en criticar todo lo ajeno sino en legislar a través de las redes sociales.
Al igual que el joven diputado del distrito 10, ninguno de los diputados “ciudadanos” -que dicen vienen a revolucionar la forma de hacer política… “en los bueyes de mi compadre”- hicieron público el aumento salarial que aprobaron en secreto. Vamos, para nuestra sorpresa Augusto Valencia no tuvo el valor de “denunciarlo” a través de sus redes sociales, tan acostumbrados que nos tiene a “ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio”.
Bueno, ¿y qué podemos decir de los legisladores del PRI y del PAN, así como del PRD que también fueron cómplices en este “madruguete” a los jaliscienses? Ya no nos sorprende. Pero es verdad, según nos confirma el periódico El Diario NTR Guadalajara, en la nota de la reportera Elizabeth Rivera en la que no revela si algún diputado se negó a recibirlo o votó en contra.
Creo que si alguno se hubiese opuesto, ya hubiera convocado a rueda de prensa para denunciarlo o lo habría hecho a través de sus cuentas en redes sociales a las que son adictos muchos de ellos.
La nota dice:
“Desde hace dos meses los 39 diputados y 10 funcionarios de primer nivel del Congreso del Estado se aumentaron el sueldo, pero lo hicieron en silencio.
“Desde hace cuatro quincenas los legisladores ganan nueve mil 262 pesos más, al pasar de tener un sueldo de 107 mil 235 a ganar 116 mil 497 pesos brutos. Los directores de área y el secretario general del Congreso del Estado, acrecentaron el dinero que reciben en entre seis y 10 mil pesos al mes brutos…
“El salario neto que se entregaba a los diputados era de 65 mil pesos al mes y a partir del 1 de julio será de 70 mil pesos mensuales.
“La ampliación del dinero que reciben los diputados se descubrió porque este miércoles los legisladores aprobaron cambiar 10.5 millones en  las partidas del presupuesto 2016, para poder hacer el pago del incremento salarial y de otros gastos.
“Cabe recordar que al inicio de la actual legislatura, 18 de noviembre 2015, en sesión se avaló la iniciativa de acuerdo legislativo con la que se aprobó el Pacto de Austeridad, Racionalidad y Transparencia para la 61ª Legislatura del Congreso del Estado de Jalisco.
“El pacto, establece que: “Los diputados integrantes de la Legislatura 61ª, no incrementarán sus dietas y sueldos en el tiempo que dura la misma”, concluye la nota periodística.
Con esta descarada decisión tomada a espaldas de los ciudadanos por los que se “desgarran las vestiduras”, ¿seguirán teniendo autoridad moral nuestros diputados para presentarse como “hermanitas de la caridad” y “jinetes” de la justicia, la verdad, la transparencia y la honestidad?
Sí, yo también creo en los Reyes Magos.