Con un lenguaje inusual en él y tras reiterar que aspira a la candidatura del PRI al gobierno estatal, el senador Ramiro Hernández García retó a sus adversarios priistas que tienen el mismo objetivo a que se compare lo que han hecho en la vida pública y hasta lo que ha sido su misma vida privada.
“Frente a los protagonismos de otros, (reto a) que nos midamos en donde hemos estado, qué hemos hecho y qué hemos dejado de hacer. Más allá de las apariencias, estoy dispuesto a asumir la evaluación y revisión de nuestros resultados en lo que hemos hecho, pero también en nuestra vida pública y privada.
“¡Ahí estoy a la luz pública! Para que (los precandidatos del PRI) podamos ser medidos y evaluados en lo que somos en términos personales, familiares y de desempeño en los cargos públicos en los que hemos estado”, apuntó.
Ante las críticas que se le han hecho en el sentido de que no toma decisiones, que le hace falta ser más contundente y que nunca quiere pelearse con nadie, el también ex dirigente estatal del PRI, acota:
“Posiblemente me falte protagonismo, y sí creo que a veces la modestia en la política no es lo mejor, porque pareciera que lo que hay que tener es esa actitud de protagonismo que, incluso, llega a chocar con la frivolidad. Pero yo nunca me he doblado ante nadie, y si no, que le den una revisada a mi pasado, en las buenas y en las malas. Y ni he cambiado para marearme cuando me suba a un escalón. He sido invariablemente igual y tampoco me he rendido ante la adversidad.
“A lo mejor me cuesta trabajo el protagonismo -reiteró-, pero ni tengo confusión, ni tengo debilidades ni le saco al ejercicio de la responsabilidad, ni tampoco a asumir el liderazgo que este estado necesita”.