Después de varias semanas de escuchar críticas y acusaciones por parte de algunos grupos priistas; luego de no ser escuchado en Casa Jalisco al advertir diferentes errores en las políticas de gobierno; Héctor Pizano abrió oídos a las opciones de trabajo que le ofrecieron en MORENA por medio de José Juan Soltero Meza e Hiram Torres, sin llegar a tomar la decisión de coordinar en el congreso la fracción de MORENA en Jalisco.
Fue hasta hace dos semanas que Enrique Alfaro buscó insistentemente a Héctor Pizano para platicar de la posibilidad de agregarse al grupo de Movimiento Ciudadano; despues de varios encuentros en privado, Héctor Pizano aceptó formar parte del grupo parlamentario local de Movimiento Ciudadano.
Desde que dejó la presidencia del PRI Jalisco, Héctor Pizano fue muy claro respecto a lo que sería su actividad de trabajo: “Asumí el compromiso de ser candidato a diputado local por la vía plurinominal y con él, la responsabilidad de construir una agenda legislativa sólida, integral y realista desde donde plantearemos la renovación de nuestro sistema político”.
En campaña Héctor Pizano fue el único candidato a diputado que presentó una agenda legislativa y argumentó sus propuestas, por eso mismo se consideraba que en MORENA tenía mayor posibilidad de liderazgo y, por tanto, de crecimiento personal.
Hoy MORENA Jalisco pierde al político que podía dar forma y estabilidad a su grupo legislativo.
Enrique Alfaro gana un aliado que sabe mucho de los hombres fuertes de la actual administración estatal, con un equipo sólido de trabajo acostumbrado a resolver problemas.
Lo preocupante aquí es el equipo parlamentario de MORENA Jalisco, pues se supone, es el grupo que podría dar estabilidad al congreso como primera oposición, pero no se conoce su agenda legislativa, ni su posible coordinador.
Parece que el Congreso del Estado será para Enrique Alfaro.
