Tuvo 60 minutos de entrevista para negar las acusaciones lanzadas por el regidor Augusto Valencia López de que se valió de su cargo al frente de la Coparmex para presionar a gobiernos municipales, entre ellos el de Zapopan, y beneficiar a su empresa con varios millones de pesos en la prestación de servicios, pero Oscar Benavides Reyes no lo hizo.
Tuvo una hora “al aire” para desmentir que presuntamente no utilizó su cargo como dirigente sindical de la Coparmex para que su empresa de la que reconoció ser socio, obtuviera recursos por más de 77 millones de pesos del Gobierno del Estado durante el período del 2007 al 2013, tanto del panista Emilio González Márquez como del priista Aristóteles Sandoval Díaz, pero Oscar Benavides Reyes no lo hizo.
Oscar Benavides Reyes fue entrevistado hoy de 9:00 a 10:00 horas por los periodistas Pablo Latapí y Marcos Arana y no se refirió, ni por equivocación, a este espinozo tema que hoy lo tiene “sobre las cuerdas”. Claro, tampoco Latapí y Arana lo cuestionaron al respecto.
Pero sobre lo que sí le preguntó Marcos Arana fue sobre el Auditor Superior del Estado contra quien Benavides Reyes emprendió durante años -si, años-, una campaña para que fuera destituído y exigiéndole al Congreso del Estado, un día sí y el otro también y a través de todos los medios de comunicación habidos y por haber, que lo retirara del cargo.
¿Lo recuerdan desgañitándose en contra del Auditor Superior en entrevistas radiofónicas y televisivas y a cuyas declaraciones le dieron amplios espacios los diarios locales, y el peregrinar por los pasillos del Congreso clamando que algún diputado le recibiera un cheque por 30 mil pesos para que el titular de la ASEJ fuera despedido?
Bueno, pues hoy Oscar Benavides Reyes fue muy, pero muy benévolo con el Auditor Superior. Vamos, era un Oscar Benavides desconocido, como si el tema del Auditor Superior fuera uno más de los muchos de los que habló sin la mayor importancia. Respondió sólo por no dejar, pero pronto quiso deshacerse del tema.
A diferencia de otras ocasiones cuando prácticamente le dedicaba muchos minutos de una entrevista a denostar y criticar al Auditor Superior, hoy suavemente, sin aspavientos ni alzando el tono de voz,  sólo se refirió a que “es importante tener una Auditoría confiable”, que el examen para elegir al titular de la ASEJ lo hizo el Congreso y no una universidad, “y luego está lo de su suegro y todo eso que la gente ya sabe…”. No más.
Pero luego declaró lo que nunca antes había dicho, ni por equivocación, cuando se refería al Auditor Superior: “No hay nada personal en contra de nadie…”.
Y es que hoy el Auditor Superior del Estado tiene en sus manos la investigación sobre presuntas irregularidades en la contratación de los servicios de la empresa de Benavides Reyes en el Ayuntamiento de Zapopan, a petición del regidor alfarista Valencia López, quien en su momento también fue de los detractores de  a quien hoy le pide su auxilio.
No hay duda. Hoy al que escuchamos fue a un Oscar Benavides Reyes, muy, pero muy desconocido…