A la pregunta expresa sobre las versiones de que de llegar a ser el próximo rector general de la Universidad de Guadalajara, Tonatiuh Bravo Padilla sería un riesgo para el liderazgo de Raúl Padilla López, el rector del CUCEA responde categórico:
“¡Son especulaciones! Yo he trabajado en equipo con Raúl desde hace 25 años y no tengo ningún motivo para dejar de hacerlo… No tengo ninguna razón ni hay ningún hecho que evidencie y que dé lugar a un comentario de esa naturaleza. Esos son comentarios de (mis) detractores…”.
– ¿Entonces garantiza lealtad para Raúl Padilla López?
– Creo que hay total certeza en mi trayectoria, de la lealtad institucional y de la lealtad al trabajo que hay que desarrollar con el liderazgo universitario…
Tonatiuh Bravo Padilla asegura no saber qué elementos hay para que se diga eso de él, pero contraataca:
“De las personas que los hacen (los comentarios), subrayaría el hecho de que el finado rector (Carlos Briseño Torres) también ocasionalmente hacía ese tipo de comentarios y, finalmente, quien padeció el problema fue él. Entonces, yo vería de quién vienen los comentarios para sacar conclusiones.
“Muchas veces el que dice que `hay viene el lobo, hay viene el lobo´, es justamente el que quiere esconder que él es el lobo… No lo sé, me da esa impresión, pero yo a las pruebas me remito”.
– Simpatizantes y detractores auguran que usted será el nuevo rector general…
– ¡Que me la hagan buena…! Creo que es natural que cuando hay una contienda y cuando hay un período de cambio, todo mundo tiene percepciones diversas respecto del mismo, pero la elección será el 31 de enero y quienes estamos registrados como candidatos estamos hablando con los consejeros universitarios…
– Pero las mismas voces aseguran que usted tiene a favor el único voto que se requiere: el del ex rector Raúl Padilla, líder moral del Grupo Universidad.
Una leve y maliciosa sonrisa se dibuja en su boca y responde:
– Raúl Padilla tiene una relación personal y amistosa con los cinco (candidatos). Yo, con toda sinceridad, he señalado muy claramente que Raúl cuenta, efectivamente, con un liderazgo dentro de la Universidad, pero ese liderazgo ni riñe ni tiene que ver con la decisión de quienes son consejeros y ejercen su voto.
“Yo creo que hay que poner cada cosa en su justa dimensión, nada más. Yo lo que puedo decir, en ese sentido, es que Raúl Padilla no va a fungir como el gran elector”.
– ¿Qué lección les dejó la crisis que la UdeG vivió hace cuatro años con el finado rector Carlos Briseño, frente a este nuevo proceso electoral?
– Todos debemos cuidar la elección de rector general. Yo creo que hay que poner mucho énfasis en las capacidades de comunicación con los liderazgos institucionales que tiene la Universidad; observar muy bien la plataforma de trabajo y, sobre todo, mirar las trayectorias, de tal manera que… bueno, es impredecible decir si alguien va a fallar en su carácter…
“Pero ya desde antes de la elección anterior se podían advertir algunos rasgos del ex rector (Briseño Torres), que en un momento determinado, efectivamente resultaron confirmados.
“En esta ocasión, lo menos que tenemos que hacer es generar una situación atípica, una situación que influya de manera negativa en el proceso.
“Creo que, más bien, hay que abrirnos, hay que expresarnos y contribuir a que el proceso electoral pueda dar buenas cuentas a todos los universitarios”.
– De ser usted el nuevo rector general, ¿le da lo mismo tener enfrente a un gobernador de extracción priista o hubiera preferido a un panista?
– Creo que a la rectora o rector que gane, sí le representa un escenario favorable estar frente a un gobierno de alternancia; es decir, un gobernador que gana desde la oposición. Esa es una ventaja porque da la oportunidad de reestructurar y rehacer cosas.
“Segundo, el signo del partido no me dice nada, sólo que históricamente el PRI y la Universidad de Guadalajara, en su época moderna, provienen del mismo movimiento social que es la Revolución Mexicana. Creo que eso hay que considerarlo…
“Y un elemento final que también es favorable para fincar esa relación positiva entre gobierno y universidad es que el gobernador (Aristóteles Sandoval) es universitario, es egresado de la UdeG, y tiene una trayectoria, incluso, de representante dentro de la misma.