Hacía mucho que no visitaba el restaurante Rugantino, el que está en avenida López Mateos 330, casi esquina con avenida México en Guadalajara.

Antes iba por sus buenas pizzas aunque el lugar se veía cada vez más descuidado, a la baja.

Pero hace unas semanas, motivado por las pizzas del lugar llegué un domingo y me llevé la grata sorpresa de verlo renovado y mucho mejor.

Para empezar el lugar fue remodelado y tanto el interior como la terraza se convirtieron en espacios muy agradables.

Pero en lo más importante, en la comida, las mejoras fueron aún mayores: un menú más amplio de platillos, se mantienen las pizzas como opción para comer y ahora cuenta con una buena carta de vinos.

¿Qué pasó? ¿Por qué se dieron estos favorables cambios en Rugantino? Pues resulta que hubo cambio de propietarios y hoy quien está al frente del lugar es quien fuera chef del restaurante El Italiano, uno de mis favoritos.

Así que estos cambios en Rugantino lo convirtieron en un restaurante muy sólido, con un lugar agradable, muy buena comida, buena carta de vinos y buen servicio. De esos lugares para volver y volver.

Como en los buenos restaurantes creativos, además de los platillos del menú tiene los especiales temporales, como los chamorros de borrego que aparecen en la foto de arriba.

En el menú encontrarás muy buenas pastas, como el Espagueti al pesto que está en la foto y principales como el Pollo a la parmigiana que está en otra.

Pues hoy tenemos otro buen restaurante de comida italiana en Guadalajara, el Rugantino.

Sin duda un lugar para volver y volver.