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Julio César Hernández
La semana pasada comenzó la cuenta regresiva para la renovación o ratificación de todos o algunos consejeros del Instituto Electoral del Estado, proceso que deberá de estar finiquitado parael uno de junio próximo.
Apenas la presidenta de la Comisión de Asuntos Electorales, Ana Bertha Guzmán Alatorre, había presentado su iniciativa para actualizar la Ley Electoral definiendo al órgano electoral como Instituto y no como Consejo cuando el diputado panista José María Martínez Martínez presentó su iniciativa en la que propone la creación de una Comisión Especial que se haga cargo de este proceso, quitándole esa potestad a la comisión que preside la panalista-priista Guzmán Alatorre.
La diputada considera que no se justifica crear esta comisión especial, luego de que fue derogado el artículo 113 de la Ley Electoral que así lo establecía, pero reconoce que la Junta de Coordinación Política tiene la facultad de crear comisiones para atender asuntos especiales y éste puede ser el caso.
Sin embargo, la propuesta de Martínez Martínez está llena de “sospechosismo” y hay quien considera que con ella se busca manipular un proceso donde siempre los ganadores son los partidos políticos y los grandes perdedores los ciudadanos, pues más que tener un órgano electoral ciudadanizado, lo que se engendra es un Instituto Electoral a modo de los partidos políticos con consejeros que responden más a los intereses de éstos que de los ciudadanos.
Guzmán Alatorre asegura que este proceso de elección de los nuevos consejeros o ratificación de algunos o todos los actuales se hará conforme lo marca la ley, pero ahí en las bancadas parlamentarias hay verdaderos “lobos” de la política que saben cómo manipular estos procesos para disfrazarlos de “ciudadanos” y terminar repartiéndose en cuotas partidistas el Instituto Electoral.
Reitero: hay quienes advierten en la iniciativa de “Chema” Martínez una amenaza por quedarse con la mayor rebanada -para los partidos políticos- del “pastel” electoral.