Julio César Hernández
Entre las declaraciones públicas que hay que registrar para pedir cuentas de su cuplimiento más adelante, están las que ayer hizo el coordinador de la fracción priista en la próxima Legislatura, Roberto Marrufo Torres, cuando anunció que auditores, fiscalistas y contadores se pondrán a trabajar de inmediato para hacer una revisión puntual y profunda para detectar anomalías en el Congreso del Estado.
Y advirtió que si las hubiere (las anomalías) se procedería conforme a derecho.
Sólo habría que recorarle a Marrufo que la instancia que tiene la facultad de solicitar las auditorías no es el coordinador de la bancada mayoritaria sino el presidente de la Comisión de Administración, así es que primero habría que ver quién es el diputado que encabezará esta Comisión y esperar a que solicite esta investigación, a la Auditoría Superior, por supuesto.
Pero si se hiciera esta auditoría y arrojará irregularidades, ¿deveras Roberto Marrufo se atreverá a tanto o es una simple declaración para salir al paso de los cuestionamientos de los reporteros o, bien, para “dorar la píldora” a la ciudadanía y enviarle el mensaje de que los nuevos diputados serán honestos, no se prestarán a negociaciones “bajo la mesa” y, mucho menos, caerán en el despilfarro de los recursos como las dos últimas Legislaturas que los antecedieron?
La percepción ciudadana es que por supuesto que hubo anomalías e irregularidades en el manejo de los recursos públicos de la Legislatura aun vigente, y el ejemplo más fehaciente -entre otros-, es el hecho de que le propio diputado del PRI, Jorge Villanueva, presidente de la Comisión de Admiistración, denunció que su antecesor en el cargo, Jorge Arana -hoy diputado federal- no le entregó toda la documentación, como los estados financieros del 2009, lo que corresponde a lo que va de este año y la lista de basificados del último año.
¿Deveras Marrufo Torres estará dispuesto a arremeter en contra de sus propios correligionarios salientes que tengan responsabilidad en las irregularidades encontradas? ¿Deveras hará una investigación a fondo? ¿Todo dependerá de él para que logre sortear cualquier oposición que encuentre en el camino para denunciar y sancionar dichas irregularidades?
¿Acaso la dirigencia de su partido avalará que actúe en contra de sus propios compañeros de partido que hoy ocupan otro cargo de elección popular, administrativo o que se encuentra “en la banca”, y que son responsables de las posibles irregularidaes o ilícitos que se encuentren?
La verdad es que dudamos que eso suceda, por eso es importante guardar estas declaraciones de Marrufo para en su momento pedirle resultados.
A ver si no nos sale luego con que “no hay que ver al pasado sino al futuro”, que “yo no veo hacia atrás, sino siempre hacia adelante”, que él no caerá en una “cacería de brujas” o, lo que sería peor,… ¡qué todo está correcto!”
28 enero, 2010
