Julio César Hernández
– Aris, de aquí voy para mi casa y se me olvido la bicicleta, ¿me echas un aventón?
– ¡Uy, Poncho! No me traje mi carcacha, agarré el Macrobús… ¡ups! digo, el Trolebús y me bajé aquí en Independencia y Alcalde, pero ahorita alquilamos una calandria y que nos lleve…
Este pareciera ser el diálogo que sostienen los alcaldes en funciones y electo de Guadalajara, Alfonso Petersen Farah y Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, respectivamente, si nos atenemos a lo que observamos en las fotografías que acompañan a este texto. Pero no, no lo es. Se trata del encuentro entre los dos políticos tapatíos que civilizadamente se reunieron ayer para tratar asuntos que tienen que ver con la entrega-recepción del Ayuntamiento y los casos más importantes que el primero dejará pendientes a su sucesor, como son la Villa Panamericana, el Macrobús y Puerta Guadalajara.
Estos son tres casos muy polémicos que no están sostenidos por una abse sólida que haga viable su realización, tal y como lo vislumbra la actual administración municipal saliente. Así es que seguramente lo tratado ayer entre ambos, dará “señales” a Sandoval Díaz para tomar decisiones definitivas ya en el cargo.
Petersen salió a la antesala de su oficina a recibir a Aristóteles y después se metieron al comedor del Ayuntamiento para comer y platicar por algunas horas, luego de lo cual atendieron a los reporteros de la fuente.
Hasta donde se aprecia, parece que no habrá mayores problemas para que luego de 18 años de estar al frente del Ayuntamiento un alcalde panista le entregue el gobierno a un priista.
25 julio, 2009
