Julio César Hernández
Si bien su iniciativa de “Ley Antiborrachos”, con algunas modificaciones planteadas externamente, suma adeptos, por otro lado los últimos días no han sido “miel sobre hojuelas” para el coordinador de la bancada del PAN en el Congreso, Abraham González Uyeda, que ha tenido que “meter reversa” en algunas decisiones sobre el grupo de legisladores, ante la inconformidad de varios de ellos.
A esto habrá que sumarle las no buenas relaciones que tiene con su compañero José María Martínez Martínez, quien ya advirtió que se le ha relegado de algunas decisiones tomadas por González Uyeda, no obstante ser de la misma corriente política dentro del PAN.
Para empezar, los principales conflictos que ha enfrentado Abraham González tienen que ver con el reparto de los recursos económicos que reciben como bancada, pues una parte de ellos se han destinado a aportarlos al partido, aunque hay quienes sospechan que más bien se destinan a “trabajar” en la precampaña del ex subsecretario de Gobernación por la gubernatura.
Cuentan que, por ejemplo, además de su sueldo quincenal de 35 mil pesos -limpios de polvo y paja-, para cada diputado se dispuso de 92 mil 200 pesos bajo el rubro de apoyo parlamentario, pero que inicialmente Abraham sólo les quiso dar 45 mil pesos y el resto aportarlo a las tareas del partido.
Sin embargo, ante la amenaza de rebelión de sus correligionarios tuvo que ceder y entregarles 87 mil pesos y los 5 mil 200 restantes dirigirlos a las arcas del PAN. Sin embargo, a quienes son integrantes de su corriente política sólo les corresponderán 72 mil 200 y destinarán al partido 20 mil pesos mensuales.
Otro asunto de conflicto fue también lo que tiene que ver con el apoyo para gasolina, pues no obstante que tienen derecho a vales por 9 mil pesos mensuales, únicamente se les pretendió entregar 2 mil y que los 7 mil restantes también fueran a parar como aportación al PAN.
Finalmente, otro punto motivo de discordia fue el número de asesores o empleados que puede tener cada diputado y el salario para cada uno de ellos. Los diputados, cuentan, tienen derecho a siete asesores de 15 mil pesos, pero la idea era únicamente darles tres colaboradores y que los otros también hicieran trabajos para el partido con un sueldo igual.
Así, las cosas, no serán “días de campo” los que Abraham González tenga con su fracción parlamentaria, y mucho menos si hablamos de pesos y centavos.
22 marzo, 2010
