Julio César Hernández
Los últimos días 15 han sido trágicos para el periodismo jalisciense. Quizás como nunca.
Cuatro compañeros periodistas de los diversos medios de comunicación locales han fallecido por diversos motivos en tan corto lapso. Lamentables sucesos que han enlutado no solo a sus familiares y amigos sino también a quienes ejercemos lo que Gabriel García Márquez llama “el mejor oficio del mundo”, y en lo que seguramente coincidieron quienes pasaron a mejor vida, porque todos ellos vivieron y ejercieron la actividad periodística con pasión.
David “El Negro” Guerrero, periodista radiofónico de muchos años en Radio Universidad; Jonathan Bautista, joven periodista de televisión; Alberto Gómez Reynoso, experimentado periodista de radio y prensa que, a diferencia de Guerrero y Bautista que fallecieron ejerciendo a plenitud su actividad periodística, estuvo postrando enfrentando una dolorosa enfermedad; y José Emilio Galindo Robles, periodista de Radio Universidad y de cuya estacion dirigía en Ciudad Guzmán.
Todos ellos fallecieron por diversos motivos y en diferentes circunstancias, pero su desaparición es un fuerte golpe para el periodismo jalisciense, porque finalmente aun tenían mucho que darle.
El consuelo que debe quedarnos, además del recuerdo personal que cada uno de nosotros podamos tener de ellos, es su legado que han dejado en este oficio y que perdurará en los ríos de tinta que desboradon durante años o en las ondas hertzianas que cruzaron fronteras hasta quién sabe donde.
Descansen en paz David, Jonathan, Alberto y Pepe.
25 noviembre, 2009
