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Julio César Hernández
Sin comprometerse a cumplir con el período por el que la ciudadanía de Zapopan lo eligió como regidor del próximo Ayuntamiento, Guillermo Martínez Mora terminó con las especulaciones y aseguró que sí asumirá el cargo como edil de la administración que encabezará el priista Héctor Vielma Ordoñez.
Sin embargo, para evitar que alguien se haga ilusiones -ni siquiera quienes sufragaron a su favor-, advirtió que no aseguraba mantenerse en ese cargo los tres años que marca la ley, pues categóricamente señaló: “Yo no puedo hacer ningún compromiso porque no sé el futuro”.
Bueno, curiosa forma de Guillermo Martínez Mora de entender el compromiso que cualquier candidato adquiere ante la ciudadanía, independientemente del resultado de la elección, aunque si bien no se concretó ahora de entrada, quizás no pierde la esperanza de más adelante volverse a integrar al gabinete estatal.
Pero, por lo pronto, anunció -acompañado del dirigente del PAN zapopano, Bernardo Guzmán, y del también próximo regidor Omar Barba- que la fracción panista en el próximo gobierno municipal será una “oposición responsable”, que no se convertirá en un obstáculo y que trabajará a favor de los ciudadanos.
Sin duda que ésta es una buena noticia, por supuesto, pero sí quisiéramos que busque convertirse en un contrapeso del gobierno, como esperamos que todos los que son oposición en otros Ayuntamientos lo sean. En una palabra: que no acepten ser “maiceados2, porque eso no es sano para un gobierno, de cualquier nivel.