Gilberto Pérez Castillo
Los panistas volvieron a montar el show del juramento del Código de Ética de su partido.
Encabezados por el presidente estatal Hernán Cortés Berumen, quienes son y serán funcionarios públicos surgidos del PAN se reunieron en el Salón Fiesta Guadalajara para realizar un juramento que -de repetirse los resultados los últimos tres años- podría no ser más que un espectáculo montado para aparecer en los medios de comunicación.
Hace tres años, encabezados por su entonces dirigente estatal Eduardo Rosales Castellanos, los panistas se reunieron en el Foro de Arte y Cultura y ahí montaron el mismo show para acabar pisoteando durante todo el trienio no solo el Código de Ética panista, sino las leyes y reglamentos vigentes.
Como se sabe, durante los últimos tres años los gobiernos panistas, sobre todo en la zona metropolitana, protagonizaron una de las etapas más corruptas de la historia de Jalisco.
Dicha corrupción fue tan burda que hasta el mismo gobernador panista Emilio González reconoció y pidió hoy a los nuevos alcaldes, “ayudemos a que los próximos Presidentes Municipales no tengan los problemas que ustedes tienen: contrataciones de última hora, basificaciones, endeudamiento, autorización de fraccionamiento; ustedes díganme, los veo en la prensa (esos desfalcos)”.
Y hasta donde se sabe, a nadie le han aplicado una sanción por haber incumplido en dichoso Código de Ética.
25 enero, 2010
