Hace algunas semanas, envalentonado, el dirigente y diputado federal del Partido Verde Ecologista de México en Jalisco, Enrique Aubry de Castro Palomino, declaró a los “cuatro vientos” que “rompía” con el PRI, con el titular del Ejecutivo, que porque no cumplía los acuerdos signados en la pasada alianza para las elecciones del 2012 y que, por tanto, para el 2015 su npartido jugaría solo el proceso electoral.
Pero apenas había anunciado su “ruptura” con el gobierno de Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, cuando en dos ocasiones se sentó a la mesa de la “gran comilona” con los hombres más cercanos al titular del Ejecutivo, allá en su lugar favorito, Punto Sao Paulo. Por supuesto, ese encuentro le resto credibilidad a su amenaza al priismo jalisciense.
Sin embargo, Aubry de Castro Palomino sigue “amachado” en que va sólo en la elección del próximo año porque tiene la “venia” de su dirigencia nacional, entiéndase el propietario del PVEM, Jorge “El Niño Verde” González. Y no sólo eso, sino que ha lanzado una campaña publicitaria y propagandística tapizando los caminos que llevan a Guadalajara de espectaculares con su imagen bajo el pretexto de su informe de actividades.
En ese marco es que ha enviado la “amenaza” a los priistas jaliscienses de que buscará ser el candidato de su partido a la presidencia municipal de Guadalajara. Pero no sé por qué, pero creo que aquí sucederá algo similar a Guanajuato, donde la dirigencia estatal del Verde se “rebeló”, rompió con el PRI de aquella entidad y anunció que iría solo en las elecciones del 2015. Finalmente las dirigencias nacionales del PRI y el Verde pusieron en paz a los inquietos verde-ecologistas e irán en alianza.
Pero mientras eso se concreta aquí, partimos de lo dicho por Enrique Aubry de que su partido irá solo en las elecciones del año próximo… excepto en Tlaquepaque.
Sí, Aubry ya “amarró” con el PRI de Tlaquepaque apoyar la candidatura de su colega en San Lázaro, Luis Armando Córdova Díaz, a la presidencia municipal. Se dice que son socios, no sabemos en qué, pero sí podemos adelantar que lo serán en los comicios del 2015 y que el PVEM hará una alianza de facto con el poder en Tlaquepaque, en caso de que no se concrete la coalición que por ley exige que los partidos que contiendan bajo esta fórmula deben de hacerlo en el 25% de los municipios.
Aubry y Córdova se han entendido bastante bien y no son pocas las ocasiones en que se reúnen en público a tratar seguramente asuntos de negocios…electorales. O sea, los pormenores de una estrategia que le permita al priista suceder a Alfredo Barba Mariscal, frente a un PAN que seguramente buscará recuperar el poder en la Villa Ex Maicera, de la mano de los hermanos Cortés Berumen y su equipo.
Así, mientras “son peras o manzanas” y se confirma o no si el Verde “rompe” con el PRI para 2015, Enrique Aubry y Luis Córdova siguen el camino trazado por ellos mismos: ser aliados electorales. Al tiempo.