Quizás a la presidente municipal de Tlaquepaque, María Elena Limón García, poco le importó la crítica del coordinador de los regidores del PRI, Luis Armando Córdova Díaz, en el sentido de que “lo que debió de ser un acto republicano de rendición de cuentas, de hablar sobre el estado que guardan las cosas dentro de la administración municipal -su informe de gobierno-, pasó a ser un evento suntuoso, distrayendo recursos municipales que tanto nos hace falta, que fue de los sublime a lo ridículo”.
A la “Nena” Limón tampoco le afectó que la regidora del PAN, Carmen Lucía Pérez Camarena, haya dicho que las pormesas hechas en campaña por la alcaldesa siguen sin cumplirse y están lejos de ser realidad.
Lo que sí debió de haberle “caído en el hígado” y frustrarle el festejo por su primer informe de gobierno fue el “regalo” que le hizo llegar el Tribunal Electoral del Estado horas después del evento, y que fue su sentencia en la que le ordenan restituirle el personal, el vehículo y demás derechos que como síndico le retiró a Juan David García Camarena hace algunas semanas, en una muestra más de que en Tlaquepaque “nada más mis chicharrones truenan”.
Recordemos que en julio pasado, en un arranque de autoritarismo y revancha porque previamente en una sesion de Cabildo García Camarena exigió respeto a su investidura y a su trabajo y cesó al director Jurídico que le impuso la alcaldesa, Limón García decidió no sólo retirarle algunas atribuciones sino dejarlo sin personal de apoyo -ni secretaria que cuando menos le sirviera el café- al que asignó a otras áreas, además de quitarle el vehículo que servía para que la Sindicatura cumpliera con sus encomiendas.
Ante esta absurda actitud, García Camarena recurrió al Tribunal Electoral ante el que interpuso un juicio para la protección de los derechos políticos-electorales del ciudadano y éste órgano resolvió que “al actor se le agravia al comisionar a distintas áreas a nueve funcionarios adscritos a la Sindicatura (…)”, con lo que -señala David García en su texto-  se le redujo “injustificada, irresponsable y ostentiblemente el personal que integra la función pública de la Sindicatura Municipal”.
Asimismo, el Tribunal establece que también se le agravia al actor al solicitársele “poner a disposicion el vehículo al  servicio de la Judicatura”, lo que “a su juicio impactó directamente con la capacidad de ejecutar la función de Judicatura Municipal”, “violándosele su derecho a ser votado en la modalidad del debido ejercicio del cargo para el que fue electo…”.
Así, en un juego de 38 cuartillas, la sentencia del Tribunal Electoral del Estado que ayer por la tarde recibió la alcaldesa Limón García, en síntesis, establece lo siguiente:
“En razón de lo anterior, se REVOCAN los oficios identificados con las claves 809/206, 810/2016 y 814/2016, así como con los diversos con número 4089/2016, 4090/2016, 4092/2016, 4093/2016 y 4094/2016, y el identificado como Admón. Veh. 267/2016, emitidos el dieciocho de julio del año en curso, por el Coordinador General de Administración e Innovación Gubernamental, la Directora de Recursos Humanos y la Directora de Patrimonio respectivamente, todos del Ayuntamiento de San Pedro Tlaquepaque, Jalisco.
“Asimismo, se ordena al Coordinador General de Administración e Innovación Gubernamental, a la Directora de Recursos Humanos y la Directora de Patrimonio, para que dentro del término de tres días hábiles contados a partir de que surta efectos la notificación de la presente resolución, realicen las gestiones administrativas necesarias para que los ciudadanos comisionados o readscritos a diversas áreas distintas a la sindicatura, mediante los oficios en comento, sean puestos a disposición de ésta última, así como para que se ponga a disposición de la Sindicatura encabezada por el actor el vehículo materia de la Litis.
“De igual forma, de conformidad con lo que dispone el artículo 47 de la Ley del Gobierno y la Administración Pública Municipal del Estado de Jalisco, se vincula a la Presidente Municipal del H. Ayuntamiento de San Pedro Tlaquepaque, Jalisco, a efecto de que vigile y conmine al cumplimiento de lo ordenado en la presente sentencia”.
El Tribunal le da un plazo de tres días para ejecutar y cumplir con la sentencia.
Quién iba a decir que el primer “descalabro” a la “Nena”  Limón no se lo daría la oposición del PRI o del PAN sino uno de los integrantes de su propio equipo al que menospreció, lo que quizás provocó que diera por adelantado el “Grito”… de coraje.