Julio César Hernández
Con un discurso diferente al emitido el pasado miércoles a través de un comunicado de prensa en donde aseguraba que su viaje a Cuba con el alcalde de Tlajomulco y aspirante a la gubernatura, Enrique Alfaro Ramírez, “de  ninguna manera interfieren con la responsabilidad que tengo en el Instituto ni con la imparcialidad que como funcionario electoral he demostrado”, el presidente del Instituto Electoral, Tomás Figueroa Padilla ofrece una disculpa pública a la ciudadanía por ese acto.
“Deseo ofrecer a la ciudadanía una disculpa pública por un acto absolutamente legal que sin embargo generó una mala percepción. En lo sucesivo será más cuidadoso y tomaré las medidas necesarias para que ninguna acción o decisión del ámbito privado pueda incidir de manera negativa en el debate de los asuntos públicos que al Órgano Electoral le competen. Hoy en día la acción Electoral exige mayor pulcritud y atención”.
Previamente confesó que toda vez que su viaje a Cuba con Alfaro Ramírez ha despertado diversas opiniones, “he leído y escuchado todas ellas con atención” y “las respeto y registro con el ánimo más positivo”.
Y luego agrega en el comunicado:
“Resulta imprescindible aclarar la confusión derivada de una mala comprensión de la Legislación Electoral. Reitero que los días durante los que realicé mi viaje, corresponden a vacaciones, y no a una licencia.
“Entiendo que mi decisión de viajar al extranjero, tuvo implicaciones que en ese momento no dimensioné. Entiendo ahora y justifico las dudas que puedan despertarse de una actitud del ámbito privado, pero que efectivamente alimentan sospechas sobre la responsabilidad pública que me ha sdio conferida”.
Anuncia que convocará al Consejo General “para desahogar cualquier asunto o inquietud que sean plantead (…), atenderé las recomendaciones que surjan y en su caso tomaré las medidas necesarias para darles seguimiento”.