En las últimas semanas el Partido Encuentro Social (PES) ocupó espacios poco usuales para un partido político chico en los medios de comunicación, luego de que se anunció su alianza con el partido lópezobradorista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) -que valió una protesta de la escritora y fan del tabasqueño, Elena Poniatowska-, y en Jalisco no fue menor la noticia al saber que  Gonzalo Moreno Arévalo era designado su dirigente estatal.
Moreno Arévalo fue priista por muchos años y diputado local y federal por el PRI, recordado por aquella escena donde como legislador federal se colocó frente a la tribuna legislativa cargando un “cilindro” de gas butano -era un globo con esa forma-, en protesta por el alza en el precio del combustible.
Hoy Gonzalo Moreno tiene la encomienda de superar lo que en su corta vidas ha obtenido este partido en Jalisco, cuya paternidad se le achaca al ex secretario de Gobernación y aspirante al senado, Miguel Ángel Osorio Chong, con la colaboración de iglesias y grupos cristianos.
Actualmente el PES gobierna el municipio de Ayotlán, con Gabriel Vásquez Andrade como alcalde; tiene cuatro regidurías: Villa Corona, Gómez Farías, Ojuelos y Ciudad Guzmán; así como una diputada federal por Jalisco -primera circunscripción-, Norma Edith Martínez.
En 2015 logró en la entidad una votación alrededor de 72 mil sufragios y se quedó a 3 mil votos de lograr el porcentaje requerido para obtener su registro aquí.
Ahora, en esa alianza con Morena y el Partido del Trabajo, el PES va en busca de ese registro y de tener una mayor representatividad en el estado, pues tendrá la oportunidad de encabezar con sus candidatos 28 municipios, seis distritos locales y cinco federales, aún y cuando no se han definido nombre y apellidos de los prospectos.
¿Deveras el PES, junto con Morena, se convertirán con esa alianza en la sorpresa electoral del 2018 en Jalisco? ¿Lograrán arrebatarle votos que pudieran sentir suyos partidos como el Revolucionario Institucional -por el origen político de Gonzalo Moreno- y Movimiento Ciudadano -con el que estuvo aliado el candidato a la gubernatura Carlos Lomelí Bolaños-?
Resultará interesante conocer el efecto de esta alianza -Morena/PES- en Zapopan, municipio en donde tanto Lomelí como Moreno tienen una fuerte influencia y un amplio trabajo político realizado desde hace ya varios años, el primero en el distrito cuatro y el segundo en el distrito seis, de donde ha sido legislador.
Incluso, aunque aún no hay nada definido todavía, a los nombres del diputado Hugo Rodríguez y del regidor José Hiram Torres, se suma el del mismo Gonzalo Moreno como prospecto a la candidatura a la presidencia municipal.
Sin duda, pues, que la ex Villa Maicera tiene un escenario político-electoral muy interesante por la variedad de partidos y candidatos que estarán contendiendo en contra del partido alfarista Movimiento Ciudadano que hoy gobierna el municipio, aunque no cuenta con las diputaciones que salvo el distrito 10 -local y federal- ganó hace tres años el PRI.
Al tiempo.