Lo que sucede en el gobierno municipal de Zapopan es grave. No debe verse simplemente como temas anecdóticos.
Nepotismo es corrupción. Y en la administración de Pablo Lemus se está practicando con singular alegría.
Unos casos más graves que otros y algunos que generan sospechas de posibles actos de corrupción en ciernes, hacen pensar que lo que pasa en ese gobierno del Partido Movimiento Ciudadano no son descuidos sino todo un modo de operar.
El Coordinador de Análisis Estratégico y Comunicación, Zul de la Cueva, quien fue despedido por protagonizar un pleito en estado de ebriedad en el estadio de los Charros de Jalisco, tenía a su hermana también en la nómina zapopana.
José Ramón Vega Vázquez, Subdirector de Servicios Públicos Municipales, tenía a su hijo Guillermo como subordinado y a su sobrina Valeria en la Dirección de Mantenimiento de Vehículos de Servicios Públicos.
Ana Paula Virgen, secretaria particular de Pablo Lemus, logró también meter a la nómina a sus dos hermanos, Moisés y Miguel Arturo.
Julio César López Baquera, director de Mantenimiento Vehicular, tenía a a sus dos hijos, Óscar Fernando y Julio, trabajando en su misma dirección.
En todos estos casos, fueron las denuncias públicas las que obligaron a Lemus a sacar a los familiares de sus allegados y no, al parecer, su convicción personal en contra del nepotismo.
Lo delicado es que en ningún caso se ha sancionado a los responsables de esos actos de nepotismo que, como dije antes, constituyen actos de corrupción prohibidos y sancionados por las leyes.
Pero un caso aún más grave es la red que le crearon en los servicios médicos municipales al hoy diputado federal plurinominal y empresario del sector salud Carlos Lomelí Bolaños.
Un muy allegado ex empleado de su empresa,  Hiram Torres Salcedo, es regidor en Zapopan y preside la ¡Comisión de Salud! También es miembro del ¡Comité de Adquisiciones! y tiene a su tío Jorge Tonatiuh Torres como ¡director del Hospital General de Zapopan “Hospitalito”!
Óscar Nicolás García Lomelí, primo de Carlos Lomelí, es el nuevo ¡director de Servicios de Unidades Médicas!
Como se recordará, durante las campañas del 2015 del Partido Movimiento Ciudadano, hubo señalamientos que indicaban que Carlos Lomelí Bolaños era el principal financiador de las campañas de Enrique Alfaro y Pablo Lemus.
Conocido como controvertido proveedor de varios gobiernos en el sector salud, llama por supuesto profundamente la atención que Pablo Lemus le haya construido esta red al diputado federal plurinominal de MC precisamente en los servicios médicos municipales. Y también explicaría la prisa que éste tuvo por concluir el “Hospitalito” en tan poco tiempo.
Por supuesto que salta de inmediato la sospecha de que se le esté pagando a Carlos Lomelí el dinero que metió a las campañas de Movimiento Ciudadano, facilitándole hacer negocios en los servicios médicos municipales, por sí o por terceros.
Insisto, lo que pasa en Zapopan no es asunto menor.