Titulado “Unidos con Alfaro y por Jalisco”, los senadores Clemente Castañeda Hoeflich y Verónica Delgadillo García; los 12 diputados federales jaliscienses; los 16 legisladores locales y los 57 presidentes municipales -entre ellos Jesús Pablo Lemus Navarro, quizás muy a su pesar-, todos ellos de Movimiento Ciudadano, emitieron un desplegado -de apenas cinco párrafos- en el que manifiestan su apoyo al gobernador Enrique Alfaro Ramírez, en torno al cual “cierran filas”, y en el que dejan un mensaje que no sólo su dirigente nacional, Dante Delgado Rannauro, sino los del resto de los partidos políticos debieron de haber leído con mucha atención.
Es en los últimos renglones en los que los “abajofirmantes” dejan el mensaje, “entre líneas”, con el que el propio Alfaro Ramírez ha amagado sin declararlo abiertamente a la dirigencia nacional de MC y, particularmente, a su coordinador nacional, Delgado Rannauro. Estas líneas dicen:
“Este proyecto, que hemos formado mujeres y hombres libres de Jalisco, no le pertenece a nadie. es de la sociedad jalisciense. Por ello, este movimiento político seguirá caminando con quién se comprometa a respetar y cuidar los intereses de Jalisco.
“Que quede claro, este movimiento se la juega con el gobernador Enrique Alfaro y por Jalisco. A donde vayamos, caminaremos juntos”.
No hay que ser adivino para saber que este texto fue redactado por encargo y en Casa Jalisco, y que únicamente se les notificó a todos los “abajofirmantes” que su nombre iba a ser incluido, lo que queremos creer que aceptaron sin “patalear”, incluyendo a Lemus Navarro, quien en su declaración ayer a los medios de comunicación sobre el tema hoy de moda, se deshace en halagos y loas empalagosas para el gobernador Alfaro Ramírez, e incluso considera tener la estatura moral para pedirle que no se vaya de Movimiento Ciudadano, un partido al que él mismo desprecia y se niega a afiliarse.
Pero volviendo al desplegado, ¿qué quisieron decir los senadores, diputados y alcaldes, firmantes oficiales, con el texto referido líneas arriba? No hay equivocación alguna: Se ponen a disposición del mejor postor, por un lado, y, por el otro, le manifiestan públicamente al gobernador Alfaro -incluido Pablo Lemus, aunque sea “de dientes para fuera”- su lealtad y fidelidad al grado de que no obstante de que él ya dijo que no participará en la toma de decisiones en Movimiento Ciudadano, que ahora le corresponderá a los demás integrantes del Grupo Jalisco hacerse cargo del proceso electoral, y que él se retira completamente de la política concluyendo su gobierno, o sea el 7 de diciembre, los “abajofirmantes” llegan a declarar que, como “movimiento político” -ojo, subrayo- “se la juega con el gobernador Enrique Alfaro y por Jalisco. A donde vayamos, caminaremos juntos”.
“A donde vayamos, caminaremos juntos”, dicen los “abajofirmantes”. ¿Y quién marcará la ruta del camino por el que “caminaremos juntos”? ¿Enrique Alfaro como líder moral y político del grupo? ¿Clemente Castañeda como heredero del movimiento del que es fundador¿ ¿O, eventualmente, Alberto Esquer Gutiérrez, quien es otro de los fuertes aspirantes a ser candidato a la gubernatura, junto con Castañeda? Obviamente, nadie piensa en que pueda ser Jesús Pablo Lemus, quien por muy popular que sea no es un hombre de fiar y es capaz de llevarlos al desfiladero si así conviene a sus ambiciones e intereses.
Contra lo que, confieso, creía que iba a suceder, no hay duda de que con este texto son los legisladores y los alcaldes de Movimiento Ciudadano los que -no por su iniciativa, obvio-, dan el siguiente paso después del que dio el 14 de julio y que ratificó anteayer Alfaro Ramírez, respecto a deslindarse -todo el “movimiento político”- del MC de Dante Delgado y ponerse a la disposición del Frente Amplio de Xóchitl Gálvez.
La “pelota” ahora está en la “cancha” de los partidos del Frente Amplio. Marko Cortés, Alejandro Moreno y Jesús Zambrano. ¿Estarán dispuestos a “adoptar” al Grupo Jalisco si se desprende de Movimiento Ciudadano con toda la carga negativa que traerá a cuestas como resultado del ejercicio del gobierno, y le entregarán la candidatura al gobierno del Estado, aún con el riesgo de que sus militantes inconformes apliquen aquello de “brazos caídos” en campaña y en la jornada electoral?
Al tiempo…