Con la espada desenvainada se mantiene la diputada Fabiola Loya Hernández, coordinadora de la bancada del partido Movimiento Ciudadano en la Cámara de Diputados, y en el tema de la reforma preferente enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre la Comisión Federal de Electricidad.
A principios de semana, López Obrador advirtió que a esta reforma, con la que pretende otorgar a la CFE atribuciones de producción y distribución de energía eléctrica, “no se le debe cambiar ni una coma”.
Pero resulta que Loya Hernández y su bancada tienen “otro datos” y advirtió:
“La Cámara de Diputados no puede estar sometida a la agenda que se dicte desde las mañaneras. Por eso propuse un Parlamento Abierto para analizar con especialistas esta reforma, y si es necesario modificar más de una coma. Se dará la batalla para concretar dichos cambios”.
Y en este sentido, subrayó que el Ejecutivo no puede dictarle la agenda al Poder Legislativo.
Fabiola Loya -como el resto de os coordinadores de las bancadas de oposición- tendrá que mantener una férrea lucha frente a la postura de los legisladores morenistas y sus aliados, que pretenden que las iniciativas presidenciales sean aprobadas, efectivamente y como instruyó López Obrador, sin que se le cambie “ni una coma”, sin escuchar las voces que advierten lo desatinado que sería darle luz verde a esta iniciativa.
La legisladora emecista subrayó:
“En caso de aprobarse tal cual la iniciativa preferente, habría serias afectaciones para las familias y las finanzas públicas del país, derivado de incremento en la tarifa eléctrica. Lamentablemente, la opinión emitida por la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública omite dicho impacto económico en su análisis”.
Habrá que esperar, pues, el resultado de esta batalla que anuncia un debate que permitirá a más de un legislador demostrar sus dotes parlamentarias y su capacidad para convencer a sus iguales, pero particularmente para evitar que la “aplanadora” morenista se imponga haciendo oídos sordos a voces discordantes.
Y si no, al tiempo…