Más allá de la manera en que quede integrado el próximo Congreso del Estado, por aquello de las impugnaciones que algunos partidos políticos presentaron, reclamando la asignación de un legislador que consideran les pertenece, lo que se avecina es de pronóstico reservado, pues mientras todo indica que la coalición que el PAN y el PRI integraron para pelear la gubernatura, alcaldías y las propias diputaciones no operará en el trabajo legislativo, habrá que ver si la coalición Sigamos Haciendo Historia, encabezada por Morena, se mantendrá en la LXIV Legislatura.
De entrada, está más que “cantado” que Movimiento Ciudadano y Morena integrarán los dos principales bloques legislativos con 11 y 10 diputados cada uno, respectivamente, pero hay que saber el papel que jugarán las bancadas de Acción Nacional y el Revolucionario Institucional, apostando a que ahora cada una tomará su propia ruta y se sumarán al bloque que les ofrezca mejores dividendos. Dados los antecedentes y la contienda por la gubernatura, lo más lógico que se hagan del lado de la fracción “naranja”, pero no puede descartarse que los “morenos” les hagan a ambas o alguna de ellas -la panista es más numerosa con cinco, por tres de la priista-, una oferta que les deje mayores ganancias.
Del otro lado, hay quienes confían en que, como en San Lázaro y en el Senado, los aliados de Morena, los partidos Verde Ecologista y Del Trabajo, se mantendrán como tales en el trabajo legislativo, al igual que el caso de las fracciones parlamentarias de Hagamos y Futuro. Pero…
Pero resulta que en la actual Legislatura, la diputada del Verde Ecologista prácticamente fue una integrante más de la fracción emecista y no de la morenista como se hubiese creído. ¿Hay alguna razón para que ahora con más diputados cambien de parecer? Bastará con ver a quién le responde cada uno de esos legisladores y sabremos hacia qué lado estarán.
Del caso de Hagamos y Futuro, su posicionamiento estará sujeta a lo que le ofrezca el mejor postor, pues ambas bancadas no tendrán ya partido alguno que las respalden si se confirma la sentencia del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de la pérdida de su registro, de ahí que también dependerá de quién esté detrás de cada uno de estos diputados cuando ya no tienen nada qué perder y sí mucho qué ganar. En caso de mantener el registro, el panorama no cambiará mucho, pero la pregunta se mantiene: ¿Con qué bloque jugará legislativamente?
El caso de Futuro dependerá del futuro -valga la redundancia- de Pedro Kumamoto, seguramente, mientras que respecto a Hagamos hay que ver qué quiere hacer con este partido el rector general, Ricardo Villanueva, y el resto del Grupo Universidad, aunque se sabe que al interior hay un grupo empeñado en defender hasta “con las uñas” la permanencia del partido. En caso de que mantenga su registro, habrá que ver hasta dónde llega el compromiso del Grupo Universidad para con la 4T; si todo se supeditaba a las campañas o se extendía al trabajo legislativo.
La verdad es que no se puede dar nada por seguro cuando aún faltan muchas cosas por definirse en la integración de la siguiente Legislatura y al interior de los partidos políticos y sus respectivas bancadas, pero lo cierto es que, en su momento, MC y Morena irán de “shopping”… a ver para qué les alcanza.
Al tiempo…