Si para nadie era un secreto que Carlos Lomelí Bolaños era el hombre fuerte de Yeidckol Polevnsky en Jalisco, ahora con la llegada de Alfonso Ramírez Cuéllar a la dirigencia nacional de Morena, quien se empodera en el estado es la diputada federal Laura Imelda Pérez Segura.

Compañera de curul y en algunas comisiones legislativas del ahora diputado con licencia, Pérez Segura se mantiene -porque se sabe que ese es su deseo-, como fuerte aspirante de Morena a la candidatura a la presidencia municipal de Tlaquepaque para el 2021, pero hay quienes advierten que no se le descarte como posible dirigente del partido en Jalisco.

Pérez Segura fue una férrea defensora de Ramírez Cuéllar durante el alegato en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación sobre la legalidad o no del Congreso Nacional Extraordinario donde se le eligió como sustituto de Polevnsky. Encabezó, junto con Juan Barajas, estos apoyos en la manifestación que se hizo afuera de la sede de la Sala Regional Guadalajara del TEPJF y en el “espaldarazo” que le dieron todos los legisladores federales al ex dirigente zacatecano de El Barzón.

No hay duda que Laura Imelda se convertirá en los ojos y oídos de Ramírez Cuéllar en Jalisco ante la derrota que sufrieron los yeidckolistas encabezados por Lomelí Bolaños que, sin embargo, no podemos afirmar que hay que darlos por “muertos”.

Es cierto que hay otros ramiristas en Jalisco, pero quizás ninguno con la confianza que Alfonso le tiene a la legisladora por el Distrito XVI con cabecera en Tlaquepaque, y en la que seguramente mucho se apoyará para hacer el trabajo político en la entidad, pese a su falta de experiencia.

Por otro lado, no hay que olvidar que Bertha Luján, presidente del Consejo Nacional de Morena, y Alfonso Ramírez eligieron Jalisco para comenzar su recorrido en el país con la tarea de sacar a su partido del “marasmo”. Pero sin duda que seleccionar a este estado no sólo tiene que ver con que aquí aun no hay un partido debidamente conformado -en eso trabajan-, sino que está la presencia emblemática de Carlos Lomelí, un hombre cercano a Yeidckol y que se encuentra en el “ojo del huracán” con las acusaciones en su contra que lo obligaron a dejar su cargo de superdelegado.

Valga decir que si bien en su momento el actual delegado en Jalisco en funciones de presidente, Hugo Rodríguez Díaz, tuvo el apoyo de Polevnsky, es sabido que independientemente de la resolución del Tribunal Electoral dejaría el cargo para contender por la dirigencia estatal y cubrir el período que marcan los estatutos.

De esta manera, pues, podemos parafrasear la rueda de la fortuna y decir que mientras Carlos Lomelí baja, Laura Imelda Pérez sube…

Y si no, al tiempo.