Más allá de lo sucedido por la cancelación del concierto programado para después de los discursos del cierre de campaña, debido al fuerte aguacero, razón por lo que no fue autorizado se llevara a cabo, la demostración de “músculo” que dio Morena en la explanada del Instituto Cultural Cabañas la tarde-noche del domingo (foto), refrenda que este dos de junio Movimiento Ciudadano no tendrá “un día de campo”.

Bien dicen los analistas, expertos y especialistas en materia electoral que una encuesta o un mitin no hacen ganar una elección, pero sí proyectan escenarios de lo que puede suceder -o no- el día de la elección y, por lo pronto, lo que nos dicen ambas cosas es que a diferencia del 2018, hoy Morena y aliados se han convertido en un verdadero “dolor de cabeza” para Movimiento Ciudadano, y lo menos que se afirma es que existe un empate técnico con tendencia favorable a la candidata Claudia Delgadillo González sobre su candidato Jesús Pablo Lemus Navarro, y en el mismo sentido en la competencia por las alcaldías de Guadalajara y Zapopan.

Subrayamos: Este es el escenario que se observó hasta ayer miércoles 29 de mayo, último día de las campañas electorales. Sin embargo, el domingo dos de junio, después del cierre de las casillas, podemos encontrarnos con un escenario completamente diferente por diversas razones: porque los indecisos ya definieron el sentido de su voto; porque estos tres días de reflexión antes de votar, provocaron que se cambiara el sentido del voto; y porque ese domingo se manifestó en un sentido mayoritario el llamado “voto silencioso”; además de otros factores más.

Pero hoy, las encuestas y la actuación de los protagonistas de la contienda nos dicen que existe una competencia cerrada y que no hay “nada para nadie”, contra todos los pronósticos que desde años atrás, y más concretamente en los últimos meses del año pasado y primeros de éste, aseguraban que la supuesta “popularidad” de Lemus Navarro “arrasaría” sin problema alguno a la adversaria o adversario que la oposición le pusiera enfrente, como “arrasó” con sus competidores dentro de Movimiento Ciudadano: Clemente Castañeda, Alberto Esquer, Salvador Zamora y Verónica Delgadillo. Pero Jesús Pablo “topó con pared”.

A diferencia de lo común en la mayoría de los casos, donde la oposición es la que emprende una campaña agresiva en contra del adversario oficial, pone en marcha lo que se llama “guerra sucia” o “guerra negra”, e inventa muchas cosas más con el propósito de debilitar a quien goza del apoyo de todo el aparato oficial por ser el candidato del partido en el poder y de gozar, además, de los recursos económicos y materiales necesarios, así como el control de la mayoría de los medios de comunicación, hoy todo eso no ha sido suficiente para creer que Lemus Navarro ganará sin mayores problemas; por el contrario, hoy los candidatos emecistas al gobierno estatal y a las alcaldías de Guadalajara y Zapopan, han actuado como si fueran oposición: “guerra sucia”, presión a los trabajadores de gobierno para que asistan a sus mítines y manifestaciones, aún y cuando gozan de las ventajas mencionadas líneas arriba: apoyo del aparato oficial, recursos materiales y económicos y… el control de los medios de comunicación.

Las constantes visitas al estado de la candidata presidencial morenista, Claudia Sheinbaum Pardo, para apoyar a su candidata a la gubernatura, Delgadillo González, generó una “ola” muy favorable no sólo para la candidata a la gubernatura sino para los candidatos a las presidencias municipales y diputaciones federales y locales, tanto, que el propio partido Movimiento Ciudadano lo difundió con una gráfica en sus redes sociales, en las que además pide el apoyo de los simpatizantes de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco para poder ganarle a Morena.

En cambio, Lemus Navarro fue un candidato “huérfano”, pues nunca aceptó a Jorge Álvarez Máynez como candidato presidencial, jamás pidió el voto para él, evitó publicar su propaganda en pareja, como sí lo hicieron las duplas Sheinbaum-Delgadillo y Gálvez-Haro; lo aceptó y convivió con él en eventos públicos, hasta que se lo ordenaron, al parecer, desde Casa Jalisco o desde la Ciudad de México quien lo hizo candidato: Dante Delgado.

En el 2021 Morena dio señales que preocuparon a Movimiento Ciudadano, quien en los últimos días previos a la elección, puso en marcha el operativo “voto útil” que le dio resultado y logró salir airoso en aquella elección intermedia. Pero aquellas señales, tres años después, se fortalecieron y hoy tienen preocupados a Movimiento Ciudadano y sus candidatos, comenzando por Lemus, ante el crecimiento de la marca opositora que, incluso, como marca supera a la de MC.

Así, pues, las campañas concluyeron ayer con un escenario en el que se colocan muy parejos Morena y Movimiento Ciudadano, con tendencia a favor del primero y de su candidata Claudia Delgadillo. Pero el domingo 2 de junio la historia será una sola, y esa la escribirán los ciudadanos jaliscienses que acudan a las urnas.

Y si no, al tiempo…