Si bien hay quienes aún consideran que el “es tiempo de las mujeres” podría llegar a a Universidad de Guadalajara en el proceso para elegir a quien encabezará la Rectoría General a partir del primero de abril del 2025, en relevo de Ricardo Villanueva Lomelí, la posibilidad de que César “Chicho” Barba Delgadillo sea uno de los candidatos generó entusiasmo entre los universitarios y una intensa reacción de apoyo y simpatías en las redes sociales, tras nuestra entrega de ayer titulada “Chicho” Barba entra a la carrera por la sucesión en la UdeG”.
Es más, ayer Barba Delgadillo fue “bautizado” en redes sociales por sus simpatizantes como el “caballo negro” de la contienda universitaria.
El 21 de agosto pasado, en nuestra entrega titulada “UdeG 2025: Karla Planter, Leticia Leal, Mara Robles o…, revelamos en Marcatextos que los nombres de las rectoras del CUAltos y CUTlajomulco, respectivamente, así como el de la diputada local por Hagamos, se mencionaban en los corrillos universitarios como prospectas a contender por la Rectoría General, pero también referimos que un día antes el rector Villanueva Lomelí declaró a Notisistema que “una vez más vamos a demostrar que esta es una universidad democrática, que la comunidad es la que decide a través de sus representantes y elige al rector. De que sea un hombre o una mujer, son exactamente iguales…”.
En aquella ocasión no hubo manifestaciones públicas ni en redes sociales a favor de ninguna de las mencionadas, quienes tampoco han dado señales de su aspiración y, mucho menos, levantado la mano como lo recomendó Ricardo Villanueva. Y quienes prácticamente han pasado desapercibidos sin ninguna manifestación de apoyo son los que el periódico Mural “destapó” el pasado primero de septiembre como prospectos: Guillermo Gómez Mata, secretario general de la UdeG; Gustavo Padilla Montes, rector del CUCEA; José Francisco Muñoz Valle, rector del CUCS; y Carlos Moreno Arellano, director general de Universidad Virtual.
Cabe destacar que en aquellos meses -agosto y septiembre-, el nombre de César Barba no aparecía en el listado de prospectos, sino que se apostaba entonces a que sería un perfil femenino el impulsado para llegar a la Rectoría General, y se colocaba como finalistas a Karla Planter y a Leticia Leal.
Sin embargo, bastó que el rector Villanueva Lomelí declarara la semana pasada la conveniencia de adelantar la elección antes de que se lleve a cabo la Feria Internacional del Libro -lo que se asegura ya está confirmado y sólo falta definir el día-, para que las fichas en el tablero universitario comenzaran a moverse y coloquen a Barba Delgadillo en la línea de arranque para esta carrera que ya comenzó con la elección de los nuevos integrantes del Consejo General Universitario.
Ante la reacción positiva que generó la posibilidad de que César Barba sea candidato a la Rectoría General de la UdeG, he recibido infinidad de opiniones y descripciones sobre su persona, y de entre ellas destaco la referencia que hacen al libro “No-Drama Discipline” (Mano firme y compasiva) para describirlo: “Se conduce con una personalidad fresca y efectiva para disciplinar (sic) sus múltiples encomiendas de todo tipo: personales, institucionales y políticas, al ser una persona que se enfoca en la empatía en lugar de la autoridad e imposición, logrando cumplir sus metas y las tareas encomendadas, encontrando de manera transversal un impacto positivo en los espacios en donde ha incursionado profesionalmente”.
Ahora la pregunta que queda en el aire es: ¿Y cuándo levantarán la mano Karla, Leticia, César y demás posible aspirantes, como lo recomendó quien buscan relevar en el cargo, Ricardo Villanueva Lomelí?
Al tiempo…
