guadalupe-calderon
Julio César Hernández
Con la llegada de la delegada Guadalupe Calderón, prácticamente se dio el “banderazo” de arranque para la sucesión en el sector femenil del Partido Revolucionario Institucional, que actualmente encabeza María Luisa González García, regidora electa en Tlaquepaque.
Guadalupe Calderón será la encargada de “meter freno” a quienes andan aceleradas, aunque se dice que ya trae en el bolsillo el nombre de la que será ungida en los próximos días, nombre que le fue entregado desde la sede misma del PRI en el Distrito Federal.
Habrá que ver si la delegada nacional femenil priista logra hacer el relevo sin contratiempos y sin que las aguas se alboroten mucho o tendrá que enfrentar la “rebelión” de no pocas féminas del tricolor que demandan que se haga un reconocimiento a las mujeres que realmente han trabajado a favor del partido y que no se imponga una dirigente sólo por ser cercana o tener la amistad de la dirigenta nacional, Beatriz Paredes Rangel.
Dicen, pues, que Guadalupe Calderón no tendrá, en Jalisco, “un día de campo”.