Por Julio César Hernández
Aspirante a la diputación local por el distrito nueve, cuya solicitud de registro como precandidato no procedió, se anuncia que Francisco Javier Hidalgo y Costilla Hernández impugnará el dictamen de la Comisión Estatal de Procesos Internos.
Y es que el argumento para rechazarle su registro fue que le faltó una firma para cubrir el requisito, pero al parecer ahí todo es cuestión de aclarar bien de qué se está hablando.
Resulta que Hidalgo y Costilla se registró con el formato de apoyo del 30 por ciento de las firmas de los seccionales del distrito, cosa que él asegura que sí cumplió, pero la Comisión asegura que no.
La Comisión toma en consideración el territorio, o sea que el 30% que exije es de los 140 seccionales en los que está dividido el distrito nueve, pero Hidalgo y Costilla toma en consideración no el territorio sino el total de los comités seccionales existentes, que son 130. O sea que hay diez seccionales en donde no existe un comité integrado.
Por lo tanto, para el Comité de Procesos las firmas que debió de llevar Hidalgo y Costilla debieron ser 35, pero para el aspirante el porcentaje exigido representaba únicamente 34 firmas, que son las que presentó.
Si el sentido común no nos falla, la razón está del lado de Francisco Javier Hidalgo y Costilla, pues de dónde se quieren sacar firmas de comités que no existen.
¡Ah! Pero el sospechosismo nos dice que hay un interés especial por beneficiar al único aspirante que sí cumplió con los requisitos, que sería José Luis Ocampo de la Torre, a quien impulsa el diputado y delegado del CDE en Guadalajara, Javier Galván Guerrero.
