Julio César Hernández
“Sobre el cadáver de un líder” es el nombre de la película que antes de “La Ley de Herodes” refleja lo que por muchos años fue parte del sistema político mexicano, concretamente al caciquismo sindical, y que hoy quizás muchos añoran.
Interpretada por David Reynoso y Gonzalo Vega, entre otros, esta cinta refiere cómo ante el cadáver del dirigente obrero se arma todo un entramado del nacimiento de un nuevo liderazgo sindical a costa de quien yace inerme sobre su cama y al que le aparecen quien sabe cuántas viudas reclamando el cuerpo… y la herencia, ¡por supuesto!
Bueno, pues si bien muchos gobiernos, ya no sólo priistas sino también ahora panistas -¡quien lo fuera a creer!-, se ven fotografiados en la cinta que interpreta Damián Alcazar y Pedro Armendariz y que apenas la semana pasada -el 18- cumplió 20 años de su estreno, en “Sobre el cadáver de un líder” podemos advertir fielmente la situación nque guarda la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP).
Otrora uno de los tres principales pilares del PRI, el denominado sector popular es hoy ese “cadáver” que yace en su lecho sobre el que se tejen infinidad de disputas por el poder, tanto a nivel nacional como local. Para lo único que sirve hoy es para que sus dirigentes escalen espacios de poder, sin la representación que los sustente.
¿A quién representan Marco Antonio Bernal, en el país, y Elisa Ayón Hernández (izq. foto), en Jalisco? ¿Quién los eligió dirigentes del sector popular? ¡Nadie! ¿Quién los colocó ahí? El aun infaltable “dedazo” de “El Gran Elector”. Ellos llegaron a sendas diirgencias como, exactamente, Gonzalo Vega se convierte en el sucesor del dirigente muerto. (Le recomiendo ver la película).
La CNOP está a punto de cumplir 67 años de su fundación y están por celebrarse una serie de eventos con este motivo. Sin embargo, bueno sería que no pierdan de vista el aniversario de su fallecimiento y no estaría por demás que también se conmemorara, porque hoy ya no representa a nadie ni sirve para nada, salvo para que los dirigentes sigan escalando espacios políticos.
A nivel nacional, Emilio Gamboa Patrón está por asumir la dirigencia para desde ahí buscar la presidencia nacional del PRI. A nievl local, le acaban de enviar a Elisa Ayón a Antonio Lugo, como coordinador técnico o algo así, para colocarlo en la antesala de la dirigencia estatal.
Para eso sirve la CNOP, para que sus dirigentes sigan acumulando poder… “sobre el cadáver de un líder”.
22 febrero, 2010