Ver para creer. La emergencia sanitaria decretada por el coronavirus ha dado pretexto al gobierno de Enrique Alfaro Ramírez para llevar a cabo todo clase de excesos, particularmente en lo que se refiere al endeudamiento del Estado como hacía mucho no se efectuaba en tan poco lapso de tiempo: 16 meses.
Aun circula por ahí el video donde Alfaro Ramírez puso el “grito en el cielo”, a través de una rueda de prensa que encabezó en la Plaza de la Liberación, criticando una deuda de poco más de 2 mil millones de pesos contraída por el entonces gobernador Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, pero comparado con lo que hace ahora al frente del Ejecutivo, aquello fue una “bicoca”.
Ayer en sus redes sociales, a reserva de confirmar las cifras, la diputada Mariana Fernández Ramírez fue clara al exhibir el endeudamiento alfarista. Escribió: “Si se concreta la autorización para contratar otros 6, 200 mdp en deuda, el Gobierno de MC -se abstuvo de señalar directamente al gobernador por su nombre- habrá contraído obligaciones de pago por 17,600 millones en apenas año y medio. 33 mdp por cada día que han gobernado”.
Así, según la legisladora priista Enrique Alfaro ha endeudado a Jalisco por 33 millones de pesos cada 24 horas en menos de año y medio de gobierno.
Pero no sólo eso. Su gobierno también se está caracterizando por el desaseo en su actuar, pues so pretexto de la emergencia sanitaria suplanta a miembros de su gabinete y al Congreso del Estado mismo, otorgándole -o pretendiendo otorgarle- facultades a otras instancias para realizar tareas que no le corresponden, como bien me lo hizo ver un conocedor de las tareas del gobierno y de la función del Poder Legislativo..
Es el caso de la Comisión Interinstitucional de Reactivación Económica y de su secretario técnico, Mauro Garza Marín, ex presidente de la Coparmex Jalisco. Por un lado, Garza Marín es el vocero para anunciar y explicar el nuevo endeudamiento del gobierno estatal, cuando es labor del titular de la Hacienda estatal, Juan Partida, abordar el tema; por el otro, la Comisión Interinstitucional asume funciones que corresponden a otras instancias como es la de elaborar la propuesta del endeudamiento.
Pero lo peor. Pretenden desplazar, ignorar o menospreciar al Congreso del Estado, y Garza Marín anunció la creación de una “comisión externa para la vigilancia de la correcta ejecución de este recurso, que estará compuesto por organismos de la sociedad civil, los sindicatos, el sector productivo y la academia…”.
¿Qué no es el Poder Legislativo, por ley, el responsable de vigilar el gasto del Poder Ejecutivo? ¿Dónde carambas se otorga esa facultad a una “comisión externa”? ¿Por qué la Comisión Interinstitucional pretende asumir tareas y facultades que ninguna ley le otorga y sí, en cambio, legalmente las tienen otras instancias?
Aquí la pregunta es si los diputados de oposición -porque seguramente los del partido alfarista Movimiento Ciudadano acatarán sin recato alguno lo que les instruyan desde Casa Jalisco-, permitirán ese atropello, si adoptarán la actitud sumisa que ya caracterizó a los “cúpulos” empresariales frente al gobierno estatal; si no mostrarán aunque sea un poquito de decoro, decencia y vergüenza para no permitir ser avasallados y ridiculizados a la vista de todos los jaliscienses por el Ejecutivo, so pretexto de hacerle frente a la emergencia económica por causa del coronavirus.
Y habrá que ver también si el Poder Legislativo no vuelve a cumplir con la tarea de ser una simple “Oficialía de Partes” del gobierno del Estado y le cumple el capricho de mayor endeudamiento, a cambio de alguna dádiva tan común en estos casos, en lugar de hacer un reajuste al presupuesto ya asignado.
Pero hay otro punto importante. Si aprobarán otro millonario endeudamiento para que sea destinado a rubros a los que no lo pueden dirigir, como también lo advierte la diputada Fernández Ramírez al señalar lo siguiente:
“Hay que advertir otra cosa a los empresarios: esos 6,200 -completitos- tendrán que ser usados en obras productivas; la ley no les permite usar endeudamiento ni para compras de insumos ni para programas de transferencia directa como los que proponen para la reactivación económica”.
Así, pues, será responsabilidad del Congreso del Estado, aún y de los propios diputados alfaristas, evitar que el Ejecutivo haga un “cochinero”, a diestra y siniestra, en tiempos del coronavirus.
Al tiempo…