Por: Hugo Luna
El gobierno de Emilio González Márquez, presentará el día de hoy su programa anticrisis que tiene el propósito de proteger el empleo de los jaliscienses y generar crecimiento en el presente año. Lamentablemente lo decimos: va contra la marea de la recesión y los pronósticos pesimistas.
El pacto de González Márquez guarda lógica: ajustarse al plan del gobierno federal, mismo que buscará incentivar el consumo de las personas y empresas, en particular busca aligerar costos como el de los combustibles al congelar el precio de la gasolina y reducir el precio del gas.
La estrategia de la administración estatal contempla una inversión cercana a los 11 mil millones de pesos en infraestructura y existe el compromiso de otorgar este año 20 mil créditos vía Fojal y capacitar a más de 45 mil pequeñas y medianas empresas. Además el estado cuenta con 250 millones de pesos para la inversión en ciencia y tecnología; misma cantidad para apoyo a la industria tradicional, como la del calzado, mueblera, textil, entre otras.
También se canalizarán 100 millones de pesos en apoyos a la atracción de inversiones, así como otros recursos en inversión metropolitana y para los Juegos Panamericanos de 2011.
Claro que dichas medidas son temporales y sabemos que algunas de ellas podrán provocar distorsiones, como sucederá con el congelamiento del precio de la gasolina, tal y como vimos en el pasado.
Los gobiernos emanados de Acción Nacional demuestran incapacidad para afrontar esta situación. Es un error considerar la crisis económica y financiera como la causa de los males del país y sus regiones, como si México tuviera un proyecto de desarrollo en realización, ni soñarlo.
Surge la pregunta obligada saber si el plan podrá contra los pronósticos pesimistas que marcan una caída en la economía mexicana.
