Por Julio César Hernández
Resulta extraño que la secretaria del Medio Ambiente, Martha Ruth del Toro, en su afán por combatir los altos índices de contaminación en la Zona Metropolitana tome decisiones que afectan a la ciudadanía y las haga públicas sin antes haberlas consultado con el gobernador Emilio González Márquez, quien 24 horas después las descalifica y rechaza.
Primero sucedió con aquel anuncio que hizo de que en Jalisco se aplicaria el programa “Un día sin auto”, lo que inmediatamente fue negado y rechazado por el titular del Ejecutivo. A Martha Ruth no le quedó otra más que “apechugar”.
Ahora fue en ocasión al anuncio de que dejarían de circular en “hora pico” los vehículos anteriores a 1993, con el propósito de disminuir los índices de contaminación.
Pero resulta que nuevamente el Gobernador le dio para atrás a esta declaración y dijo que él no está de acuerdo en esa medida y que, por supuesto, no la aprobaría. Martha Ruth, por lo tanto, tendrá que “apechugar” por segunda ocasión.
¿Por qué Martha Ruth del Toro toma decisiones y las hace públicas sin concultar al Mandatario? ¿Rebeldía o simple capricho?