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Lo que se reportó anteayer por la noche como una agresión de simpatizantes de la coalición Sigamos Haciendo Historia en contra de quien identificó como “integrante de nuestro equipo” y que desde un vehículo los grabó y acusó de agredir a otras personas sin que ese hecho se registrara en el video, tomó una dimensión inesperada al ser el motivo por el que Juan José Frangie Saade decidió no participar en ningún debate más en contra de sus contrincantes Pedro Kumamoto Aguilar y Oscar Santos Rizo, de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco.

Ambos candidatos, a través de sus respectivos videos en redes sociales, le recriminaron su decisión y argumentaron que la razón de su negativa a debatir era porque no quería rendirle cuentas a los zapopanos.

En su carta, Frangie se refiere únicamente a Kumamoto y le reprocha que haya guardado silencio por la agresión grabada, y tras anunciar que ya habían presentado la denuncia correspondiente, agregó:

“Ante el silencio del candidato de Morena, Pedro Kumamoto, he tomado la decisión de NO (mayúsculas en el texto original) asistir a ningún debate con el candidato de los 5 partidos. Tengo claro que no tengo nada que debatir con un cobarde que prefiere callar ante estos hechos. Tengo claro que no debatiré con un candidato que representa a un partido como Morena que usa la violencia para intimidar”.

Poco después, mediante un video en redes, Kumamoto Aguilar le respondió a Frangie Saade:

“Juan José Frangie acaba de publicar una carta para decir que no va a ir al debate oficial del Instituto Electoral (…), porque el día de ayer se dio una confrontación entre militantes de Movimiento Ciudadano y la coalición, hecho que considero no debió de haber sucedido. Como saben, estamos en contra de la violencia, de la provocación y de la confrontación. Es lo que hemos venido denunciando en los últimos días, y creo que en mi historial de vida es lo que he demostrado con cada una de mis acciones.

“Pero, por otro lado, usar este caso como excusa para no ir a un debate, a mi me parece absurdo. Yo sé que Frangie no quiere ir al debate porque, por lo general, se equivoca y porque no quiere dar la cara a la gente (…). Y luego, Juan José, cuando en la carta me dices cobarde… pero, pues tú eres el que no quiere debatir (…). No ir al debate es una falta de respeto para la gente de Zapopan, no para mí”, concluyó.

¿Alguien se imaginó antes de la contienda, que a este nivel de enfrentamiento llegaría la campaña entre Frangie y Kumamoto, partiendo de la enorme diferencia de votos que obtuvo en el 2021 el primero (157 mil 494) frente al segundo (50 mil 095) que en aquella elección quedó en tercer lugar como candidato de Futuro Jalisco, luego de Alberto Uribe (59 mil 456) que fue el candidato de Morena?

¿Alguien se imaginó ver este escenario en Zapopan y no en otro municipio donde la contienda se creía más cerrada? Sin duda es toda una sorpresa…

Al parecer, tres años después, el candidato de cinco partidos se ha convertido en un peligroso rival ,electoralmente hablando, del presidente municipal con licencia, quien seguramente por estrategia, más que por la razón que argumenta, decidió no ir a ningún debate en esta campaña. ¿Le costará caro no haberlo hecho o le beneficiará? Recuérdese que en 2018, Andrés Manuel López Obrador no fue a un debate y eso le costó puntos, tanto que le preocupó y asistió a los demás, que no recuerdo si fue uno o dos.

Creo que Frangie comete un serio error al no asistir ni siquiera al debate que organiza el IEPC -los demás son “llamadas a misa” y quizás hizo bien en no asistir-, y el espacio que le dejará a sus rivales, particularmente a Pedro Kumamoto, lo aprovecharán muy bien y le sacarán enorme “jugo” que podría ser determinante en el resultado del dos de junio próximo.