La historia política de Jalisco nos demuestra que el Grupo Universidad, como tal, nunca ha ganado una elección; o sea, nunca ha sido el fiel de la balanza que decida el triunfo para el candidato o candidatos que apoyan, ni siquiera a favor dequienes son integrantes de él.
No lo fue en 1997 cuando su ex rector Tonatiuh Bravo Padilla fue candidato del PRD a la presidencia municipal de Guadalajara; no lo fue en el 2000 cuando Mara Robles Villaseñor fue candidata a la alcaldía tapatía por el Partido del Trabajo; no lo fue en 2015 cuando el hoy rector Ricardo Villanueva fue candidato del PRI a la alcaldía de Guadalajara, cuando el diputado Enrique Velázquez González lo fue a la presidencia municipal de Zapopan y no lo fue en ese mismo año cuando Celia Fausto Lizaola fue candidata del PRD a la alcadía de Guadalajara. Vamos, ni Enrique ni Celia alcanzaron en esa ocasión llegar como regidores. Los votos que obtuvieron no fueron suficientes ni para eso.
O sea, en 2015 el Grupo Universidad tuvo lo que nunca: ¡tres candidatos a presidentes municipales de la zona metropolitana… y ninguna ganó!
Las diputaciones obtenidas por el Grupo Universidad han sido gracias a la estructura del partido que los postuló, como el propio Alcalá Padilla por el PRI en el distrito ocho, o porque para llegar a la Cámara de Diputados o el Congreso del Estado, mayoritariamente la vía fue una candidatura plurinominal en los primeros lugares. Así llegó al Congreso estatal el propio jefe político del Grupo, Raúl Padilla López, en 1997.
¡Hasta las internas perdía! Por ejemplo en el PRI, dos candidatos del Grupo Universidad perdieron los procesos internos para las diputaciones: Héctor Salgado y Samuel Romero Valle. Y me recuerdan que por eso se acuñó la famosa frase: “El león no es como lo pintan”.
El Grupo Universidad ha jugado durante todos estos años con candidatos en todos los partidos, no obstante tener bajo su control desde hace ya bastante tiempo al Partido de la Revolución Democrática. Las alianzas con el PRI y con el PAN, principalmente, le han dejado buenos dividendos. Y ahora con el alfarismo en el partido Movimiento Ciudadano.
Aunque mantiene el control del PRD por el que postularán a algunos de sus miembros como los antes priistas Leobardo Alcalá, Patricia Retamoza y Jaime Priero, el Grupo Universidad creó ahora su propio partido político bajo el nombre genérico de Hagamos, que aseguran pretende ser la versión jalisciense del partido español Podemos que dirige Pablo Iglesias, un partido de izquierda fundado en 2014.
Y de entre sus candidatos destaca el hasta hace apenas unas semanas diputado federal y coordinador de la bancada del partido Movimiento Ciudadano en San Lázaro, Tonatiuh Bravo Padilla, quien por segunda ocasión buscará la presidencia municipal de Guadalajara con un grupo de compañeros como candidatos a regidores que en su mayoría son identificados como parte del mismo Grupo Universidad.
A Bravo Padilla lo acompañan la dos veces diputada y regidora Celia Fausto Lizaola, quien fue precandidata única a la presidencia municipal de Zapopan semanas atrás, pero que al parecer, aseguran, los números no le eran muy favorables y decidieron mejor integrarla al equipo del también ex rector del CUCEA, para dejar en su lugar a la regidora zapopana María Gómez, hasta hace unas semanas emecista. También aparece el doctor Héctor Raúl Pérez Gómez, ex director del Hospital Civil y ex director del OPD Hospitales Civiles.
En esta planilla hay algo peculiar: integraron a dos universitarios que fueron candidatos a regidores en la planilla de Bravo Padilla en 1997. Se trata del abogado y ex consejero de la Judicatura, Alfonso Partida Caballero, y la activista social y ambientalista Martha María del Rayo Calderón García, ex diputada perredista. Hoy ambos repiten en la lista.
El resto de los integrantes de la planilla son profesionistas con especialidad mayoritariamente en Ciencias o Estudios Políticos: Francisco Hernández, Hiram Esaú Ramírez Castellón, Verónica Hurtado López y Yesenia Berber Orozco; así como una médico cirujana, Mayra Rivera; un atleta paraolímpico, José de Jesús Villarreal; y una doctora en Geografía y Medio Ambiente, Fabiola Figueroa Neri.
Las grandes preguntas que propios y extraños se hacen son: ¿Por fin el Grupo Universidad será capaz de ganar una elección a través de su propio partido? ¿Logrará colocar regidores en los Ayuntamientos de la zona metropolitana y municipios más importantes del Estado? ¿Alcanzará a ganar diputaciones para integrar una bancada desde la cual defiendan sus intereses?
Reitero: Hasta el momento, el Grupo Universidad no ha sido factor de decisión en los resultados electorales. ¿Lo logrará ahora a través de su propio partido? ¿Romperá la maldición?
Al tiempo…