En nuestra entrega del 16 de enero pasado, titulada “Iconia y la transferencia ilegal: ¿delito o debe anularse?”, referimos lo siguiente:
“¿Por qué como presidente municipal Enrique Alfaro no atacó la transferencia ilegal de Puerta a Guadalajara a Iconia, como estaba obligado? ¿Por qué no combatió su anulación? ¿Por qué, en cambio, validó esa transferencia y posteriormente aprobó la desincorporación de una parte del terreno para que OHS la vendiera a otro desarrollador -como lo reveló NTR Guadalajara-, sin que la empresa obligada hubiese cumplido con la entrega de obras establecidas en el contrato firmado durante la administración de Alfaro? ¿Se puede atacar jurídicamente la transferencia ilegal que Puerta Guadalajara hizo sin la autorización del Ayuntamiento como quedó establecido en el Contrato Fideicomiso Guadalajara? Los jueces, en este caso, deberán de concluir si en estas acciones existe delito qué perseguir o simplemente todo lo que se hizo posterior a la transferencia ilegal es nulo, pues ésta nunca contó con “el consentimiento expreso y por escrito del Ayuntamiento”, de acuerdo al Contrato aludido.
“El munícipe de Guadalajara, Jesús Pablo Lemus Navarro, anunció la semana pasada que hoy lunes presentaría toda la documentación que avala que el terreno es propiedad privada, pero expertos en el tema argumentan que Lemus, Alfaro y quien sea podrán presentar todos los documentos que quieran para afirmar que el pleito que llevó a los tres estudiantes a la cárcel “es entre particulares” y así “lavarse las manos”, pero advierten que en este caso hay un vicio de origen al haberse celebrado una transferencia que fue ilegal porque nunca contó con la autorización del Ayuntamiento de Guadalajara y, por lo tanto, esa superficie deberá de ser regresada al Fideicomiso que la tenía en posesión. Lemus Navarro debe combatir la anulación de la transferencia ilegal si no quiere pasar a ser cómplice”.
La respuesta a aquellas preguntas y al planteamientos que hicimos en aquella entrega, la encontramos ayer en la información publicada por el diario NTR Guadalajara, titulada “Alfaro privatizó terreno de Iconia”, en la que destacan los siguientes párrafos:
“El polémico terreno de Huentitán por el que fueron procesados tres estudiantes de la Universidad de Guadalajara (UdeG) acusados del delito de despojo de inmuebles y aguas tras manifestarse en el lugar, pasó a manos privadas durante la gestión como alcalde del hoy gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez.
“Fue el 14 de agosto de 2017 cuando González Alcérreca, en su carácter de director de Obras Públicas, firmó la resolución del expediente CC 2691/2017, en la cual se determinó la subdivisión del terreno…
“El oficio firmado por González Alcérreca está contenido en las escrituras públicas 6419, emitidas el 7 de septiembre de 2017 por el notario público número 17 de Tlaquepaque, Agustín Ibarra García de Quevedo.
“Dicho acto se inscribió en el Registro Público de la Propiedad, con lo que oficialmente el predio original de más de 13 hectáreas (ha) fue dividido en tres y la fracción más grande, de 5.7 ha, se escrituró a favor de la empresa OHS. Posteriormente, en noviembre de 2017, la compañía vendió dicho terreno a la empresa Hoteles Riviera Deluxe en 500 millones de pesos (mdp)”.
Todo lo anterior sucedió cuando Enrique Alfaro fue presidente municipal de Guadalajara, con lo que queda respondida nuestra pregunta de aquella entrega del “¿por qué como presidente municipal Enrique Alfaro no atacó la transferencia ilegal de Puerta a Guadalajara a Iconia, como estaba obligado? ¿Por qué no combatió su anulación? ¿Por qué, en cambio, validó esa transferencia y posteriormente aprobó la desincorporación de una parte del terreno para que OHS la vendiera a otro desarrollador…?”.
Pero también publicamos que Jesús Pablo Lemus “anunció la semana pasada que hoy lunes presentaría toda la documentación que avala que el terreno es propiedad privada…”.
La verdad no recuerdo si cumplió con el anuncio o no, pero lo que hoy se sospecha es que fue del Ayuntamiento de Guadalajara de donde salió la “hebra” que dio pie a la investigación sobre cómo en el gobierno de Alfaro Ramírez se privatizó una propiedad municipal como lo publicó ayer NTR Guadalajara, y en los corrillos políticos de Movimiento Ciudadano enmarcan esta “filtración” en el enfrentamiento “socarrón” que mantienen Jesús Pablo Lemus y Enrique Alfaro, sabedor el primero que no será el candidato “naranja” a la gubernatura, y que, por supuesto, no quiere irse “con las manos vacías”.
Y es que en su momento Alfaro Ramírez declaró que ese terreno era propiedad privada y contaba con una cuenta catastral, cosa que era desconocido para todo mundo. ¿Cómo supo el gobernador esa información de la cuenta catastral, si se suponía que el terreno estaba en manos de un Fideicomiso?, fue la pregunta que provocó ese comentario del Mandatario estatal.
¿Usted cree que esto sea cierto? ¡Yo sí…!