Aunque al momento de redactar este texto no estaba definida aún la hora, Marcatextos confirmó ayer que será el próximo lunes 24 cuando se lleve a cabo la sorpresiva reunión del rector general de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva Lomelí, con el gobernador Enrique Alfaro Ramírez y el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, que sería el primer paso con el que se pretende restablecer y rehacer el diálogo, el entendimiento y las buenas relaciones entre el gobierno del Estado y la Universidad de Guadalajara, incluyendo aquí al Grupo Universidad, luego del fallecimiento del ex rector y líder moral y político de los universitarios, Raúl Padilla López.

Digo sorpresiva porque anteayer miércoles, luego del informe de César Barba. titular del SEMS, el rector Villanueva Lomelí, luego de revelar que él ordenó retirar las lonas y despintar las bardas en contra del gobernador Alfaro Ramírez, declaró que no había fecha para reunirse con el gobernador, pero que mientras se concretaba dicho acercamiento tampoco habría marchas a Casa Jalisco. Sin embargo, ese mismo día, el miércoles, el periódico Mural ya sabía que estaba agendada una reunión entre Villanueva, Alfaro y López Hernández para ayer jueves, que se tuvo que reagendar para la semana próxima, confirmando que se realizará el lunes.

¿De veras anteayer al mediodía, Villanueva Lomelí no sabía de este encuentro que por la tarde ya era del conocimiento del diario local y que hizo público en su edición de ayer? Si no sabía y fue convocado a “bocajarro”, ¿esta fue la razón por la que se pospuso para el lunes, dándole tiempo al rector general para notificárselo al resto del Grupo Universidad y prepararse para ello? ¿O fue razón de agenda del gobernador o del aspirante presidencial?

Valga destacar que ni el Gobierno del Estado ni la Universidad de Guadalajara han informado sobre este encuentro ni mucho menos que participará Adán Augusto López, pero Marcatextos lo confirmó con “fuentes” de la Secretaría de Gobernación en la Ciudad de México.

Otras preguntas: ¿Por qué la presencia del secretario de Gobernación, López Hernández en este encuentro si las veces que se comentó de la posibilidad del diálogo, tras la muerte de Padilla López, nunca se hizo referencia a un intermediario o a la necesidad de que estuviera presente un representante del gobierno federal, que también atacó y tenía en la “lista negra” al exrector Padilla López? ¿Acaso fue Adán Augusto quien propuso este encuentro para ayer jueves, pero lo prematuro de la convocatoria pudo también ser motivo de que se reagendara? ¿O quién solicitó, entonces, la intervención del Secretario de Gobernación? ¿El gobernador Enrique Alfaro o el rector general Ricardo Villanueva? Hay una versión, no confirmada, que afirma que fue el Mandatario estatal, pero no hay que descartar que la iniciativa pudo venir de Bucareli.

Otra más: ¿La reunión será solamente entre ellos tres o Alfaro y Villanueva llevarán testigos del encuentro?

Por otro lado: ¿Es el momento adecuado para un encuentro “a bote pronto” -insisto: Villanueva aseguró que no había fecha acordada- entre Enrique Alfaro y Ricardo Villanueva, cuando no se ha cumplido ni un mes del fallecimiento de Padilla López? ¿Bastó el retiro de lonas y borra de bardas, de un lado, y la presencia del secretario general de Gobierno, Enrique Ibarra, en el informe del responsable de las preparatorias de la UdeG -nótese: no fue al de un rector de Centro Universitario-, por el otro, para creer que ya existe el ambiente adecuado para un encuentro de esta naturaleza y trascendencia entre quienes intercambiaron no sólo descalificaciones sino hasta insultos? ¿O será que todo fue un montaje que nos creímos y “tragamos” todos en Jalisco? ¿O este primer encuentro no será precisamente un diálogo, sino simplemente un en el que el responsable de la política interior en el país les “leerá la cartilla” a sus interlocutores?

Y finalmente: ¿Acudirá el rector Villanueva Lomelí a este encuentro en condiciones de igualdad o en desventaja, al estar frente a quien prácticamente se autodeclaró el principal detractor y adversario de Raúl Padilla López, por un lado, y al representante de un gobierno cuyo titular desde la tribuna de la “mañanera” agredió verbalmente al ex rector? ¿O de veras el secretario Adán Augusto López Hernández jugará el papel de mediador e intermediario imparcial, en busca de que la segunda universidad en importancia del país y el Ejecutivo de uno de los principales estados de México “fumen la pipa de la paz” y den por terminada una “guerra” declarada desde Palacio de Gobierno y Casa Jalisco?

Si no hay cambio de última hora, el próximo lunes tendremos respuesta a todas o a muchas de las preguntas aquí planteadas.

Al tiempo…