Julio César Hernández

 

José Luis Álvarez Pérez, un militante priista, hace las siguientes reflexiones sobre lo que hoy sucede al interior de su partido y que ha hecho correr en la red:

 

“Hace apenas unas semanas reflexionábamos al interior del partido sobre la figura de Luis Donaldo Colosio (…), pero hoy nos damos cuenta que a Javier Guízar el deceso de Colosio, las derrotas del partido y la falta de respeto a la dignidad priista no son temas que le incomoden, o acaso nuestro dirigente vendió el partido a la derecha gobernante.

 

“Así parece, pues Guízar en su afán de asegurarse la candidatura a la gubernatura en el 2012, cimienta su proyecto en los despojos del PRI de 2009, de 2006, de 2000, de 1995 y pasa por encima de los militantes que han hecho del PRI un partido congruente, de proyectos y resultados…

 

“Recordemos aquel mensaje de Luis Donaldo a unos días de su tragedia frente al monumento a la Revolución: ‘No queremos candidatos que al ser postulados, los primeros sorprendidos en conocer su supuesta militancia seamos los propios priistas…’

 

“Hay Javieres, como don Javier García Paniagua, que hoy son necesarios en el PRI. Se nos acusó de conservar dinosaurios, pero aquellos dinosaurios tenían h… y sabían respetar a las instituciones, sabían que al final la disciplina y la lealtad partidaria es lo que hace fuerte al PRI, lo que le da cohesión y lo que le da la certeza a los ciudadanos para emitir su voto a favor de nuestros candidatos.

 

“La única herencia que nos dejó Javier García Paniagua, en su parquedad, fue la lealtad (…); hoy la deslealtad de un pequeño sátrapa, con ambiciones de emperador, pone al partido en una encrucijada. O se da marcha atrás a los registros espurios o se recompensa la deslealtad y se sacrifica el anhelado triunfo electoral. 

 

“Hay Javieres necesarios y hay otros como Guízar y Galván que hoy sobran en el partido. Javieres que sólo buscan las candidaturas en los primeros lugares en las planillas, los espacios plurinominales y de repechaje para ellos y sus socios para hacer negocios con la derecha. A ellos no les importa la militancia, les importa la dieta”.