Por Julio César Hernández
 
Los reportes oficiales recabados hasta ahora sobre la caída del Learjet 45 de la Secretaría de Gobernación, en el que falleció su titutlar Juan Camilo Mouriño, son los siguientes:
 
– No hubo fallas mecánicas.
– No hubo explosivos.
– El piloto no reportó nada anormal ni lanzó llamada de auxilio.
– El Learjet no violó la distancia que debió mantener con la aeronave que le antecedía.
– No fallaron los controles de vuelo.
– La estela de turbulencia no lo sacó de control como para que se cayera.
– La velocidad a la que cayó la nave fue de 500 kilómetros por hora.
 
Luis Téllez, el secretario de Comunicaciones y Transportes, asegura que no hay elementos para concluir que hubo un sabotaje y que hasta ahora todo lleva a asegurar que fue un accidente.
 
¿Entonces? ¿Acaso fue decisión del piloto, en una acción suicida, venirse a pique a 500 km/hr? Es pregunta.