Contra lo que propuso el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, de construir un bloque de partido para enfrentar a Morena y al presidente Andrés Manuel López Obrador en las elecciones intermedias del 2021, el proyecto del presidente nacional de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda Hoeflich, es armar alianzas bajo las circunstacias locales.
Jalisco, sin duda, volvería a ser el laboratorio aliancista de MC en la apuesta por tener mayor presencia en el resto del país, pues de entrada se presume que iría de la mano de Acción Nacional como lo hizo en 2018: de manera selectiva y no general. O sea, solo en algunos distritos y municipios.
A esto hay que agregarle la posibilidad de una alianza de facto con nuevas organizaciones políticas como “Hagamos”, del Grupo Universidad, que está a un paso de convertirse en partido político estatal.
En la pasada entrevista que dio al Grupo Reforma -apenas unos días después de la que le concedió el gobernador Enrique Alfaro-, el también senador jalisciense es muy claro cuando confiesa que no está muy convencido que la alternativa para el 2021 sea conformar un bloque como propuso Marko Cortés. Castañeda Hoeflich subrayó: “Una estrategia electoral, de cara al 2021, es más compleja y debe sobre todo hacer eco de las dinámicas locales”.
Y luego añadió:
“Me parece que lo que hay que hacer es esperar que corra este año, que empiece formalmente el proceso electoral y entonces podremos ver bajo qué circunstancias y en qué lugares pueden construirse acuerdos políticos, más pensado en lo local que pensando lo nacional”.
Así de claro Movimiento Ciudadano: alianzas donde le convenga, donde encabece candidaturas, primero, o donde algún beneficio directo le deje la suma de siglas, y no un bloque opositor antilópezobradorista sin ton ni son. Su estrategia, de esta manera, no es pensando en arrebatarle la mayoría legislativa a Morena en el 2021 sino construir con firmeza el camino que le dé mayor presencia nacional con miras al 2024.
Y enviar desde el gobierno de Jalisco la imagen de contrapeso del gobierno federal, que algunos buenos dividendos le dejará sembrados en más de un ciudadano fuera del estado.
Si desde Tlajomulco lograron obtener la gubernatura de Jalisco, la apuesta sigue siendo la misma: de abajo para arriba, desde los municipios, los distritos y quizás alguna nueva gubernatura -se advierte difícil- para convertirse en una opción en la carrera presidencial y ser, para lograr ese objetivo, el centro de una coalición o alianza para el 2024 en torno a su principal figura: Enrique Alfaro Ramírez.
No hay duda, pues, que Clemente Castañeda, Dante Delgado y Alfaro Ramírez tienen muy claro cómo debe ser el camino por el que su partido Movimiento Ciudadano debe transitar para sortear el 2021 y llegar con fuerza al 2024.
¿Lo lograrán? Al tiempo…