Foto: @ManuelRomoP
Mientras hay quienes ya advierten que la dirigencia estatal de Movimiento Ciudadano y sus órganos de dirección corren el riesgo de ser destituidos y disueltos por la dirigencia nacional si no corrigen (sic) su postura, el coordinador estatal de MC Jalisco, Manuel Romo Parra, lanza un “cubetazo” de agua helada y “enfría” las versiones que apuestan por un desprendimiento del Grupo Jalisco o alfarista, para sumarse al Frente Amplio por México y desde ahí apoyar la candidatura a la presidencia de la República de Xóchitl Gálvez Ruiz.
Sin embargo, en los hechos no sucede lo que los primeros parecen observar y que los lleva a augurar que Dante Delgado podría de un “manotazo” sobre la mesa y desconocer al partido y sus órganos aquí en Jalisco. Y es que lo que hemos vistos hasta ahora es una diferencia de opiniones entre el dirigente nacional -y dueño- de Movimiento Ciudadano y el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, jefe político del Grupo Jalisco que conforma la columna vertebral del partido en la entidad, pero que no solamente no es militante sino que públicamente declaró que ya no se involucraría en asuntos del partido y se dedicaría exclusivamente a gobernar.
En este sentido, Dante Delgado le tomó la palabra y desde que Alfaro rompió y se salió de la mesa de diálogo que quedó abierta en aquella reunión de “petit comité” celebrada en la Ciudad de México, no lo ha mencionado públicamente para nada, aunque seguramente le envió algunos mensajes con Clemente Castañeda, Alberto Esquer y Jesús Pablo Lemus en la reciente reunión que sostuvo con ellos la semana pasada.
Pero volvamos a lo primero. Mientras Alfaro y Dante se enfrascaron en una guerra de “dimes y diretes”, de los que aún no sale el Mandatario estatal, Movimiento Ciudadano Jalisco, su dirigencia, sigue trabajando como si nada estuviese pasando y como lo mandatan no solamente los Estatutos sino la estrategia establecida y proyectada a llevar a cabo con miras al proceso electoral del año próximo.
Manuel Romo Parra y su equipo no han frenado el trabajo que como dirigencia y partido tienen que llevar a cabo para mantener a la maquinaria lista y bien aceitada para el 2024, comenzando por la designación de quienes serán los candidatos a los cargos de elección popular en juego, así como el método mediante el cuál serán electos, comenzando por el candidato a la gubernatura. Si en este proceso participa o no Enrique Alfaro, ese ya es otro “boleto” que queda en la cancha de Dante Delgado de tolerarlo o no.
La semana pasada, en una entrevista con un diario local, Romo Parra descartó una desbandada de militantes, entre ellos los que integran el Grupo Jalisco y en el que estaría incluido él mismo, con miras al 2024. Y para despejar cualquier inquietud o duda resultado de las especulaciones o análisis que se han hecho sobre los diversos escenarios en el futuro emecista, aseguró que quienes actualmente aspiran a una candidatura participarán en la contienda por ella y en las elecciones bajo las siglas y colores de Movimiento Ciudadano.
Descartó, incluso, que esto se vaya a hacer con las siglas de cualquier otro partido político o de alguna agrupación política estatal, como se difundió días atrás y a lo que el gobernador Alfaro hizo referencia. Pero todo esto solamente quedó en declaraciones.
Y así lo dijo textualmente: “Desde luego que, dentro las diferencias, pues se van construyen todos los escenarios posibles, pero dentro de Movimiento Ciudadano no vislumbramos nada que no sea el trabajo juntos, unidos”.
Y Manuel Parra subrayó algo que, al parecer, a muchos se les ha olvidado: Movimiento Ciudadano es un partido nacional y, por tanto, todos los acuerdos que se toman en Jalisco por los órganos correspondientes, tienen que ser ratificados por la dirigencia nacional, aunque eso no obsta para que sigan confiando en que Dante Delgado continuará respetando las decisiones que aquí se tomen y que, obviamente, no vayan en sentido contrario a la ruta marcada por la dirigencia nacional y sus propios estatutos.
“La dirigencia, a lo largo de la historia de Movimiento Ciudadano aquí en Jalisco, nunca ha ido en contra de lo que decide el Estado, entonces esperamos que en esta ocasión sea la misma situación, no tenemos por qué pensar diferente”, dijo Romo Parra, y seguramente así seguirá siendo mientras por mucho que Enrique Alfaro opine lo contrario que Dante, el partido en Jalisco no pretenda actuar como si fuera independiente o no responda a las directrices de su dirigencia nacional. Y hasta el momento, no lo ha hecho.
Por lo tanto, Manuel Romo Parra envía el mensaje de que la dirigencia que encabeza continuará actuando institucionalmente, más allá de los diferendos entre su líder político y el dueño del partido.
